Con un diseño robusto en su exterior y un interior confortable, Toyota ha rejuvenecido su Yaris Sedán 2019, sin eliminar, claro, lo que siempre ha caracterizado a los ancestros de este modelo: su fiabilidad.
Pese a que todavía cuenta con un diseño bastante sobrio, este Yaris Sedán ha adoptado otra identidad basada en las dimensiones y en el diseño. "Se perfeccionó con líneas fuertes", como detalla el equipo de Toyota, pero además se ha reforzado su tamaño con una longitud de 4.42 metros y un maletero más amplio que, con unas calaveras LED alargadas, parecería que se trata de un Toyota Corolla. Aunque también hay que alabar el diseño trapezoidal de su frente que además de hacerlo lucir único, lo vuelve aerodinámico.
Con la misma fórmula del pasado, en combinación con las cualidades de un auto hecho con temeridad, Toyota buscó que este carro siga siendo económico, espacioso y de mucha fiabilidad mecánica, justo como la primera generación que apareció en 1999.