Hamilton sorprende a Vettel y saldrá desde la 'pole' en Shanghái
COMPARTIR
TEMAS
El mexicano Sergio Pérez , que ocupó la séptima plaza en Australia, sale octavo, desde la cuarta hilera, al lado de su excompañero alemán Nico Hülkenberg, séptimo con su nuevo Renault
El inglés Lewis Hamilton (Mercedes), triple campeón mundial de Fórmula Uno, saldrá primero este domingo en el Gran Premio de China, el segundo del Mundial, tras batir el récord de vuelta en el circuito de Shanghái, donde firmó su sexagésima tercera 'pole' en F1, la segunda del año y la sexta seguida.
Hamilton, de 32 años, cubrió, en la tercera y decisiva ronda (Q3) de la calificación, los 5.451 metros de la pista china en un minuto, 31 segundos y 678 milésimas, 146 menos que el alemán Sebatian Vettel (Ferrari), cuádruple campeón del mundo, ganador hace dos semanas en Australia y que saldrá junto a él desde la primera fila.
El inglés mejoró este sábado una plusmarca que había permanecido vigente durante trece años, desde que en la primera edición de la carrera china, en 2004, el alemán Michael Schumacher girase en un minuto, 32 segundos y 238 milésimas.
Tras una primera jornada de entrenamientos en la que, debido a la niebla, apenas se rodó -la segunda sesión no llegó a disputarse-, los Ferrari dominaron este sábado el tercer ensayo libre, con Vettel por delante del finlandés Kimi Raikkonen.
Los coches rojos también marcaron los mejores parciales en las dos primeras rondas de la cronometrada principal, con Seb -que lidero el periplo triunfal (2010-13) de Red Bull- encabezando la tabla de tiempos de la Q1; y Kimi la siguiente, en la que quedaron eliminados los dos españoles, Carlos Sainz (Toro Rosso), que saldrá undécimo; y Fernando Alonso (McLaren-Honda), decimotercero.
Pero Hamilton aguantó hasta ahí. El espectacular y excéntrico campeón inglés salió al límite y en la ronda decisiva, en su última vuelta, logró su sexta 'pole' seguida. La segunda del año y la 63 en la categoría reina del automovilismo, mejorando su tercera marca histórica y situándose a sólo dos de la del fallecido Ayrton Senna -ganador de tres mundiales para Brasil- y a cinco de Schumacher, asimismo plusmarquista de títulos (siete) y victorias (91).
Estos dos últimos récords tardarán en ser mejorados. Pero el de 'poles' del 'Kaiser' podría caer este mismo año, si Lewis sigue en una línea de voracidad que fomentó, en primera instancia, el título que tuvo que cederle a regañadientes el año pasado a su compañero y rival alemán Nico Rosberg -retirado cinco días después de ganar la corona-; y, en segunda, la cada vez más evidente 'resurrección' deportiva de Ferrari.
Vettel se aprovechó de una mejor estrategia en su parada para ganar hace dos semanas en Albert Park (Melburne) y este domingo, en una carrera prevista a 56 vueltas -para completar 305 kilómetros- irá de nuevo a por todas.
Pero Hamilton no está por la labor de dejar escapar la posibilidad de anotarse un cuarto título mundial (el tercero con Mercedes) y, de mano, arrancará con la intención de mejorar a cinco su propia plusmarca de victorias en Shanghái. Que mejoraría su segundo puesto en la lista histórica de triunfos en Fórmula Uno, alzando la marca a 54.
Las 'flechas plateadas' se intercalaron con los Ferrari y en segunda fila saldrán los fineses Valtteri Bottas -nuevo compañero de Hamilton- y Raikkonen, cuarto en la calificación de un Gran Premio en el que desde la tercera hilera arrancarán el australiano Daniel Ricciardo (Red Bull) y el brasileño Felipe Massa (Williams).
El paulista, que revocó su retirada al conocerse la de Rosberg y retornó al equipo fundado por Sir Frank tras la marcha a Mercedes de Bottas, saldrá sexto, tras batir a su nuevo colega, el debutante canadiense Lance Stroll, décimo este sábado en Shanghái.
El mexicano Sergio Pérez (Force India), que ocupó la séptima plaza en Australia, sale octavo, desde la cuarta hilera, al lado de su excompañero alemán Nico Hülkenberg, séptimo con su nuevo Renault.
El holandés Max Verstappen (Red Bull), que el año pasado se convirtió, al vencer en España, en el más joven ganador de la historia, sorprendió al quedar eliminado, a las primeras de cambio, en la Q1. Al parecer, por un problema del software, según explicó el austríaco Helmut Marko, eminencia gris de la escudería energética.
Alonso y Sainz se cayeron en la segunda (Q2). El doble campeón mundial astur (2005 y 2006, con Renault), al que su nuevo jefe de equipo, el estadounidense Zak Brown, ha pedido paciencia hasta el verano con miras a decidir su futuro, después de un nuevo arranque de año desastroso -el motorista Honda ya se disculpó tras la primera de las 20 carreras previstas-, partirá decimotercero.
En espera de milagros -de pesca, en río revuelto- si lloviese este domingo, circunstancia que también podría aprovechar para buscar la remontada Verstappen, ex compañero en Toro Rosso de Sainz, undécimo en parrilla y que declaró que le da exactamente igual que llueva o no en Shanghái durante la carrera.