Mariano Rajoy descartó al partido Podemos a participar en la formación de Gobierno

Son tiempos de ostracismo para el partido español Podemos. En pleno proceso de formación de Gobierno, donde no han sido llamados a participar, esperan en la retaguardia sin hacer mucho ruido, un silencio que para los analistas no es casualidad ni fruto de una crisis interna, sino algo estudiado.

Atrás quedaron las portadas y los grandes e incendiarios titulares. Hoy, la formación de izquierdas que dirige Pablo Iglesias permanece a la espera, después de no haber sido llamados a participar en la formación de Gobierno encabezada por el conservador Mariano Rajoy, líder del Partido Popular (PP).

En opinión del jefe del departamento de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense de Madrid, Jaime Ferri Durá, esta ausencia de las portadas podría ser "una estrategia" para recuperar a los electores perdidos.

Con su retiro a la segunda plana quieren dejar claro que ellos no han sido los que han impedido que haya Gobierno. "Todo el mundo quiere salvarse de esa acusación", dijo a dpa.

Tras haber aceptado hace unas semanas el encargo del rey Felipe VI, Rajoy está negociando con las que considera "formaciones constitucionalistas", el Partido Socialista (PSOE) y Ciudadanos, aunque los días avanzan sin que haya acuerdos ni una fecha para la investidura.

En las elecciones del pasado 26 de junio la formación de Unidos Podemos (Podemos + Izquierda Unida) obtuvo 71 escaños pero quedó lejos del resultado que vaticinaban las encuestas y que anunciaba un adelantamiento al PSOE y una conversión en la segunda fuerza política del país.

La tesis del retiro voluntario de las portadas es compartida por el analista político Pablo Simón, quien cree que es estratégico "porque saben que no les corresponde ningún movimiento". "Ahora no pueden hacer nada más que esperar a ver si Rajoy fracasa", dijo a dpa.

No juegan "porque no tienen carta" y "lo más prudente es retirarse a los cuarteles de verano y esperar a que la situación cambie".

Simón cree además que, tras el regular resultado electoral, en el partido "están lamiéndose las heridas y repensando sus estrategias". Y es que, al ser una formación de reciente creación (nacieron en 2014), el partido tiene "varios pendientes" que resolver si quiere consolidarse

Uno de ellos es crear "un mecanismo que les ayude a resolver los conflictos internos existentes entre las distintas corrientes", explicó. Pero, lo más importante, para que Podemos sobreviva tienen que lograr encontrar la fórmula para que la gente se identifique con el partido más que con su líder, Pablo Iglesias.

"Aunque los partidos mayoritarios hayan perdido votos, la gente los sigue votando independientemente de quién sea su líder, por identificación con esos partidos. Tú eres de un equipo de fútbol sin importar quién sea su entrenador, esto es lo que hace que sobrevivan", insistió.

En Podemos desmienten cualquier existencia de crisis. Desde la secretaría política del partido explicaron a dpa que si Podemos no está participando en este proceso es porque "es el tiempo de Rajoy" y "al representar recetas opuestas es natural que no haya llamado a nuestra puerta".

"Esto no quiere decir que nos resignemos, estamos expectantes y deseosos de que el PSOE plantee una alternativa si Rajoy fracasa", dijeron. "Cuando se trabaje para una alternativa tendremos mucho que decir y por nosotros no faltará la generosidad y el diálogo para evitar un Gobierno del PP o terceras elecciones", agregaron.

Preguntados por los rumores de crisis internas, las fuentes insistieron en que "en este tiempo nos han diagnosticado muchas crisis, quizás como una suerte de profecía autocumplida, pero seguimos creciendo y consolidándonos para una etapa de menor inmediatez y más trabajo a largo plazo".

"Somos un partido nacido hace poco más de dos años y hemos tenido que desarrollar una maquinaria suficientemente resistente como para afrontar cinco campañas electorales e irrumpir en el sistema político con la fuerza con la que lo hemos hecho", dijeron.

En estos tiempos, agregaron, todo ha sido como "correr mientras nos atamos los zapatos", por lo que probablemente estén aprovechando también este tiempo para reflexionar sobre la dirección a tomar