Para saltillenses no existe la cuarentena
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Parecía un sábado normal, pero los cubrebocas de los empleados de comercios y restaurantes, y también los pocos clientes, evidenciaron que no era un día cualquiera, sino un periodo de cuarentena
Pese a la insistencia de las autoridades federales, estatales y municipales para que las personas no salgan de sus casas, los saltillenses llenaron las principales vialidades del Centro Histórico de la ciudad en la tarde del primer fin de semana de contingencia sanitaria por el coronavirus en México.
Antes de las 12:00 horas, el corazón de Saltillo lucía tranquilo, como si la gente hubiera atendido rigurosamente las medidas de prevención.
Sin embargo, para las 14:00 horas el escenario ya era muy diferente: las paradas de transporte público estaban llenas de personas que esperaban el autobús y de paseantes que bajaban a la zona centro.
Los adultos mayores ocupaban las bancas de algunas plazas públicas mientras las familias caminaban entre los puestos comida y ropa.
El tráfico se fue congestionando y los espacios para estacionarse en las calles se agotaron. Parecía un sábado normal, pero los cubrebocas de los empleados de comercios y restaurantes, y también los pocos clientes, evidenciaron que no era un día cualquiera, sino un periodo de cuarentena.
Y aunque varias cantinas estaban cerradas, también había algunas que abrieron normalmente, al igual que bares, pese a la orden gubernamental de cerrar todos los antros, bares, y centros nocturnos.
Otra evidencia de la pandemia fue que el área de juegos infantiles de la Alameda estuvo cerrada y con una lona con un mensaje por parte del Municipio de Saltillo.
