Por temor, las empleadas domésticas de Coahuila no se organizan en un sindicato, dice la CTM
Siguen sin organizarse, pese a que propuesta lleva ‘cocinándose’ desde hace dos años
En el Día Internacional de las Trabajadoras Domésticas, Tereso Medina, líder cetemista, asegura que las razones por las que las empleadas no se agrupan son por temor a perder su empleo o suponer que se trata de “deslealtad” hacia sus patrones.
A pesar que desde casi dos años la Confederación de Trabajadores de México (CTM) intentó crear un sindicato de trabajadoras domésticas, éste no se ha logrado concretar en Coahuila.
“Buscamos organizar a las trabajadoras domésticas para que se constituyan en una organización sindical para que logremos que este segmento de la población tenga seguridad social. Nosotros apelamos a que los empleadores sean sensibles para que entiendan que brindarles seguridad social a las trabajadoras del hogar no significa el fin del mundo.
“Además, hay temor por parte de ellas porque no hemos tenido la respuesta que hemos querido; me da la impresión de que no salen por temor a perder el empleo o por temor a que vayan a pensar que van a denunciar a los patrones. No puede haber represalias, pues buscamos que aporten mejores condiciones laborales”, incluso comparó el trabajo doméstico con el infantil y el agrícola.
Medina Ramírez exhortó incluso a la clase política para que sean los primeros en agremiar a las empleadas domésticas que laboran en sus hogares.
“Si todos los trabajadores del Gobierno del Estado, que tienen la posibilidad de tener en su casa a una empleada doméstica, apelo para que pongamos el ejemplo y demos la oportunidad a las trabajadoras para que tengan seguridad social. Sería un paso muy importante que en otros sectores que tengan una trabajadora en esas condiciones se animen y generemos confianza suficiente para agruparlas y darles la protección que se requiere”, dijo.
En Coahuila existen más de 65 mil trabajadoras domésticas que reciben contratos “de palabra” y por consecuencia no cuentan con los servicios de Seguro Social y perciben un salario de entre 700 y mil 500 pesos a la semana.
Las empleadas domésticas no cuentan con un contrato que indique horario de entrada, salida, prestaciones, derechos y obligaciones. Al contrario, muchas de ellas son recomendadas entre personas de alto nivel socioeconómico, según su honradez, trabajo y disposición, aunque no les pagan horas extras y algunas de ellas permanecen más de ocho horas diarias en su lugar de trabajo.
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo 2015 asegura que en México son 2 millones 466 mil 615 personas que trabajan en el cuidado del hogar son discriminadas porque no cuentan con un contrato escrito, seguridad social, ni ninguna prestación, más que los derechos y obligaciones que de buena voluntad les otorgan sus patrones.