Admiten 50% padres de Coahuila educar a hijos mediante castigos corporales, según encuesta de Sipinna

Al menos el 50 por ciento de los padres encuestados por el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna) en Coahuila admitió recurrir a castigos corporales en la crianza de sus hijos.

Teresa Araiza Llaguno, secretaria ejecutiva del Sipinna, señaló que está normalizado entre los padres de familia educar a sus hijos a través de conductas que incluyen contacto físico o gritos.

“Ellos creen que así debe ser, contestaron la encuesta sin temor, porque ellos creen que lo adecuado es dar nalgadas y gritar si sus hijos los desobedecen, o que si implementan los castigos sus hijos serán más educados y aprenderán a ser buenas personas, incluso piensan que es algo normal, que no están haciendo algo mal”, comentó Araiza Llaguno.

Señaló que las encuestas también revelaron la normalización de la violencia al interior de los hogares de Coahuila durante la pandemia y la vulnerabilidad en la que se encontraron los niños.

“Nos encontramos en una sociedad adultocentrista donde pocas veces se toma en cuenta la opinión de los niños y que es necesario decirles a los padres la prohibición del castigo corporal pero sobre todo decirles cómo sí lograr una buena educación sin golpes o gritos”, comentó, por lo que se han implementado charlas sobre crianza positiva, agregó.

Consideró que si bien no existió una disminución en la omisión de cuidados al mantener a los hijos resguardados, la violencia incrementó para revelar muchos de estos castigos corporales que si bien están prohibidos en Coahuila bajo una legislación, éstos continúan dentro de los hogares.