Aumenta este 8 de enero tarifa de la autopista Saltillo-Monterrey; ahora costará 137 pesos
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La autopista Saltillo-Monterrey tiene una nueva tarifa a partir de este lunes 8 de enero, pasando a costar 137 pesos para automóviles y pick-ups. Lo anterior representa un aumento del 4.58 por ciento respecto al costo del 2023.
El cobro de caseta de la vialidad entre las capitales de Coahuila y Nuevo León ha ido aumentando con los años, pues en 2022 costaba 106 pesos y para el 2023 pasó a costar 131 pesos, lo que entonces fue un aumento del 18.4 por ciento.
Los costos también aumentaron para otro tipo de vehículos, pues las motocicletas pagaban 65 y ahora pagarán 68; los autobuses en 2023 pagaban 247 y ahora pagarán 257 pesos; los camiones de dos a cuatro ejes pagaban 269 y ahora pagarán 281; los de cinco y seis ejes pagaron 486 pesos y ahora 509 mientras que los de siete a nueve ejes pagaban 507 pesos y este año será de 530.
De acuerdo con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, la empresa “Concesionaria Autopista Monterrey-Saltillo S. A. de C. V.” tiene la concesión de la autopista desde el 17 de noviembre del 2006.
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AUMENTOS SIGUEN A PESAR DE ACCIDENTES
Los aumentos se han efectuado a pesar de que la autopista registra un accidente al día, tal como publicó VANGUARDIA el pasado 9 de septiembre.
La autopista y el libramiento Norponiente de Saltillo son utilizados en promedio por 12 mil 158 automóviles todos los días, con una siniestralidad del 0.01 por ciento, es decir, cerca de 400 diarios.
Entonces se informó que la autopista tiene una cámara de vigilancia cada dos kilómetros conectada a un centro de monitoreo.
También se cuenta con tres estaciones meteorológicas que informan sobre las condiciones del clima en los 103 kilómetros de recorrido, así como ocho kilómetros con luminarias led en poste y tres kilómetros con luminarias led en el piso para guiar al automovilista en caso de niebla.
‘GOBIERNOS INTENTAN SACAR DINERO DE DONDE SEA’
De acuerdo con Antonio Serrano, economista y colaborador de VANGUARDIA, los servicios como el de la autopista, la energía eléctrica o los prediales se ajustan en función de la inflación.
Explicó que si bien hubo la posibilidad de no aumentar la cuota, también ocurre que ante la falta de recursos, los gobiernos pueden recuperar lo que se ha perdido por la inflación.
“Entonces sí se justifica parcialmente porque los gobiernos y porque las instituciones gubernamentales en general están quebradas y no tienen dinero, el problema es que nos transfieren esos costos a nosotros los ciudadanos y eso va a tener repercusiones en la inflación”, explicó el también docente de la Universidad Autónoma de Coahuila.
