Coahuila: Reducir jornada laboral aumentará costo laboral entre 25 y 40 por ciento: Coparmex
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Lorenzo Roel, consejero de la Coparmex, aseguró que la legislación mexicana cumple con los lineamientos de convenios y recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo; pidió no politizar y no utilizar con fines electorales la propuesta de reforma al Artículo 123 de la Constitución, para reducir de 48 a 40 horas la jornada laboral, lo que incrementaría el costo laboral entre 25 y 40 por ciento y el precio en productos y servicios.
Los días de descanso semanal, explicó, están regulados en la Fracción I, del Apartado A del Artículo 123 y la jornada y días de descanso están debidamente regulados en los artículos del 58 al 75 de la Ley Federal del Trabajo.
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“Nuestro País no ha tenido ninguna queja, señalamiento o procedimiento de queja o recomendación de la OIT, respecto a los días de descanso ni con relación a la jornada laboral. El impacto de la iniciativa implica reducir horas en la jornada laboral de empresas que realizan actividades productivas en tres turnos, diurno, mixto y nocturno, que son la mayoría del sector de manufactura y que tienen impacto en el Producto Interno Bruto”, explicó.
“Se estima que la reducción requerirá que se cubran 105 millones de horas semanales que actualmente laboran trabajadores con jornadas mayores a 40 horas. Implica que se requerirán cuando menos 2.6 millones de personas trabajadoras que laboren jornadas reducidas, lo cual es prácticamente imposible, además de que el costo por concepto de tiempo extra y por concepto de día de descanso laborado tendría un impacto anual de 360 mil millones de pesos”, advirtió.
Con la experiencia de 40 años como asesor patronal en derecho del trabajo, señaló que bajo la norma vigente la jornada máxima diurna de 48 horas en realidad es de 45 horas efectivas, descontando la media hora para descansar o tomar alimentos que en la mayoría de los casos se considera como laborada.
El llamado del sector empleador al Congreso de la Unión es que, antes de legislar sobre los días de descanso y la jornada laboral, se fomente el diálogo social, la consulta y la negociación, considerando las diversas actividades productivas.
Con diálogo, indicó, se puede definir en qué actividades la jornada laboral se puede reducir de manera progresiva, de acuerdo con las condiciones nacionales y conforme a las situaciones de cada sector de la actividad económica.
La reducción inmediata tendría un impacto que afectaría gravemente a las medianas, pequeñas y microempresas, y a sectores como la manufactura, el agro, el comercio, los servicios turísticos y gastronómicos, entre otros sectores en los que un riesgo adicional generaría aumento en la informalidad, indicó.
“La iniciativa no generaría mayor productividad ni más descansos para los trabajadores, como erróneamente se ha verbalizado, sino que impactará en el pago de tiempo extra y días de descanso laborados, que incrementarán los costos laborales entre 25 y 40 por ciento y, en consecuencia, provocará incremento en los precios de productos y servicios”, advirtió.