Con ventas a granel, los comerciantes de Saltillo intentan librar la cuesta de enero
La venta de alimentos en porciones más pequeñas se ha convertido en la mejor opción para los comerciantes de la zona Centro ante la cuesta de enero
Charolas de verdura para un caldito, bolsitas de tomate y chile, queso, frijol y jamón a granel. La venta de alimentos en porciones más pequeñas se ha convertido en la mejor opción para los comerciantes de la zona Centro ante la cuesta de enero.
“Mejor eso que no vender nada”, comenta Lucila García, vendedora
de queso y requesón, quien asegura que al menos durante enero y febrero mantendrá la venta por pieza o lo que el cliente guste comprar y no las porciones de entre 35 y 70 pesos que normalmente ofrece.
Doña Felícita Juárez asegura que el precio del kilo de papa, tomate, chile y cebolla, entre otros vegetales, se encuentra entre 25 y 30 pesos, mientras que anteriormente las familias saltillenses podían encontrar entre 12 y 22 pesos en mercados públicos.
Por lo que han optado por armar bolsitas más pequeñas que les permitan a las jefas de familia adquirir los alimentos y llevar un pan a su mesa sin que el comercio deje de tener ganancias.
Incluso en las carnicerías las carnes frías o empaques de embutidos ahora son empaquetados o envueltos en charolas más pequeñas para su venta, pues los altos precios no permiten comprar un kilo, sino porciones de acuerdo al presupuesto.
“No nos queda de otra porque es eso o no vender, la gente ahorita anda muy gastada y la verdad, para qué decir que no, todo ha aumentado, desde lo más básico como las verduras hasta las carnes y pollo”, comentó Osvaldo Ramírez, comerciante de una frutería.
Confesó que en esta temporada del año a los saltillenses no les importa comprar alimentos a punto de caducar o “madurarse” por un costo más bajo.