Lidera Manolo Jiménez preferencias en Coahuila
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Encuesta realizada por De las Heras Demotecnia refleja que, a poco más de un mes de la elección, no ha habido cambios sustanciales en las tendencias
“Aquí todo sigue igual”.
Así podría titularse el reporte sobre la tercera entrega de la serie de encuestas realizada por De las Heras Demotecnia para VANGUARDIA y que, salvo ligeros movimientos -ubicados dentro del margen de error- marcan exactamente la misma fotografía de la entrega anterior, publicada en nuestra edición del pasado 2 de abril.
¿Por qué no se mueven las preferencias? La explicación, desde la perspectiva de Rodrigo Galván de las Heras, director general de la referida casa encuestadora, es simple: lo único que mueve las agujas, para un lado o para el otro, es “la percepción de triunfo”... y esa ha estado todo el tiempo del lado del priista Manolo Jiménez.
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Adicionalmente, explica en entrevista, debe tenerse en cuenta que “el PRI y Morena se pelean al mismo elector”, y por ello, “las diferencias en las campañas, sobre todo a gobernador, en todos los estados, son de tantos puntos. Porque (los electores) o se van para un lado, o se van para el otro”.
Y, ¿qué mueve a los electores en una dirección o la contraria? De las Heras insiste: la percepción de triunfo. “Y lo que no ha cambiado en Coahuila es la percepción de que el PRI va a ganar. Por lo tanto, esa migración masiva que hay en muchos estados, del PRI a Morena, en Coahuila no se ha dado porque los priistas -también lo hemos dicho muchas veces- nunca están con el mejor: están con el que va a ganar... están con ‘el bueno’”.
MALA LECTURA
¿Por qué no han logrado los opositores modificar la percepción de triunfo? Galván considera que se trata de un error de los estrategas de campaña que “no han sabido leer al público” y eso los ha llevado a cometer múltiples errores, el principal de los cuales, considera, fue la selección del candidato.
“Sin duda creyeron (los estrategas de Morena) que Coahuila era de esos lugares en donde con la marca ganabas. Y entonces, irte con el ‘anti print’ y el cambio y no corrupción, y tal, ibas a ganar”. Quizá por ello, abunda el especialista, no valoraron adecuadamente el impacto que tendría la división con el PT, una decisión que marcó el rumbo de la elección.
El que la percepción de triunfo no se haya modificado, precisa Galván, también determina que la campaña sea una que no despierta el entusiasmo del electorado. Este hecho, anticipa, podría derivar en una baja participación el día de los comicios, lo cual es favorable para el tricolor.
“(Hay) poco entusiasmo de la gran mayoría, pero hay entusiasmo dentro del PRI. Tienen un candidato ganador... (y) lo sabemos de toda la vida: para que gane el PRI en este país, casi como regla, tienen que ocurrir dos cosas: participación baja y todo dividido en tres, irse a tercios... y eso está ocurriendo en Coahuila”, precisa el entrevistado.
El triunfo, sin embargo, dice Galván, no será simétrico para los tres partidos que integran la “alianza ganadora”, pues no recibirán los mismos votos.
“Al PRI le va a ir muy bien... va a salir fortalecido. En el (caso del) PAN, creo que va a salir una muy buena parte de la clase media. Sin embargo, no van a ser los votos panistas históricos que sacó Anaya... porque a final de cuentas, aunque Manolo es un candidato que por su perfil conecta muy bien con el PAN y las clases medias, es del PRI, y el PAN tiene muy arraigado el anti priismo en Coahuila”, explicó.
En el caso del PRD, dijo, “pues va a sacar lo de siempre: dos, tres puntitos, que van a aportar (y) les van a servir para negociar tal vez una Secretaría ‘medianona’”.
MANTIENE MANOLO VENTAJA
De acuerdo con los resultados del ejercicio realizado por De las Heras Demotecnia, el candidato de la coalición PAN-PRI-PRD, Manolo Jiménez, mantiene, en las preferencias del público, una cómoda ventaja de 17 puntos respecto de su más cercano competidor, el morenista Armando Guadiana.
La casa encuestadora considera que “el escenario más probable”, si las elecciones fueran hoy, implica que el aspirante tricolor obtenga el 47 por ciento de los votos; el morenista, 30 por ciento; Ricardo Mejía, del PT, 16 por ciento; y el udecista Lenin Pérez, 7 por ciento.
Respecto de la medición anterior, realizada al arranque de las campañas, los números de esta entrega muestran a Ricardo Mejía como el único candidato que registra un crecimiento en sus expectativas de voto, al pasar de 12 a 16 puntos porcentuales.
Los cuatro puntos que avanzó el petista se los habría “quitado” a sus tres rivales, aunque la mitad corresponden a la “pérdida” registrada por Manolo Jiménez respecto del ejercicio anterior.
En cuando a la evaluación de aspectos cualitativos, el priista se ubica a la cabeza en todos los rubros, excepto uno: la posibilidad de que los encuestados confíen el cuidado de sus hijos a algún candidato. Y es que, aun cuando es al que más personas (26 por ciento) se los confiarían, el mayor grupo de entrevistados (43 por ciento) respondió que no confiaría sus hijos a ningún aspirante.