‘Morena quiere polarizar ante falta de discurso’ aseguró Jericó Abramo Masso
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En las próximas elecciones de Coahuila, y luego en la presidencial, los ciudadanos deberán cuidar la seguridad, la tranquilidad social y poner en la balanza las estrategias implementadas por cada gobierno, como factores esenciales para atraer inversiones productivas y empleos, aseguró Jericó Abramo Masso, diputado federal.
Consideró que el Gobierno Federal descuida el tema de la seguridad pública. Es cierto, creó la Guardia Nacional y busca consolidarla, pero la mejor forma de recuperar la paz es el trabajo coordinado entre Federación, Estado y Municipios.
Es un tema que no debe politizarse nunca, sino atenderse desde el plano institucional, jurídico y de derechos, como es el caso de nuestro estado, refirió.
“Por eso en Coahuila, Miguel Ángel Riquelme es un gobernador que se sienta en la mesa con el Ejército, la Marina, la Fiscalía General de la República, la Fiscalía Estatal y los 38 alcaldes tomando decisiones sobre seguridad, sin importar si son del PRI, PAN o Morena. Eso le ha faltado al actual gobierno (federal) para que la seguridad se recupere como logramos en Coahuila”, considera el ex Alcalde de Saltillo.
Otras entidades, anteriormente pacíficas, ahora sufren los embates de la delincuencia organizada, con más secuestros y asesinatos, con retenes de grupos delictivos en sus carreteras, entre otras cosas.
En entrevista para VANGUARDIA lamentó la polarización del país debido a la reforma electoral impulsada por AMLO y Morena, con golpeteo al Instituto Nacional Electoral, aunque con el INE ha habido alternancia en el Gobierno Federal, en más de 25 estados y en más del 85 por ciento de los más de 2 mil 500 municipios del país.
-¿Cuál es el objetivo de Morena, al intentar concretar esos cambios?
Polarizar al país. Morena al quedarse ya sin discurso para la sucesión presidencial está tratando de buscar con quién cuento y con quién no, y una forma de polarizar a la sociedad es tocar al organismo electoral, que integran los ciudadanos, no los partidos. No le salió a Morena esta reforma, sabían que no iban a contar con las dos terceras partes desde abril pasado, que no tenían los votos, lo intentaron, presionaron, pero los diputados del PRI nos mantuvimos firmes y gracias a ese voto, no hubo cambio constitucional y luego inventaron el famoso Plan B”.
Le van a pegar financieramente, le van a quitar 3 mil 600 mdp, dicen que es un INE caro, sí puede ser más económico, pero en esa etapa de construcción de un INE más económico, tenemos que darle más garantías jurídicas y de operación, pero con el falso debate de reducir costos quieren quitar derechos políticos y ciudadanos obtenidos en 32 años de luchas sociales, no es posible regresar a los 70’s cuando ya tenías uno de los institutos mejor reconocidos en materia internacional para organizar elecciones. Ni Estados Unidos tiene un organismo tan ciudadanizado y transparente como el INE.
Nadie está en contra de mejorar las condiciones con las que se juega en el terreno democrático, de modernizar, de bajar costos, de mayor participación democrática, de mayor transparencia, el tema es que querían tener el control, el partido mayoritario, en la operación de las listas nacionales de representación popular.
-De fondo ¿Qué es lo que pretende Morena con la reforma electoral?
Están muy temerosos de perder el control de las cámaras en el 2024. Vieron que el año pasado perdieron el control constitucional de la Cámara, por eso no pasó la reforma energética, la electoral, cosas como esas no pasaron y eso no le gusta al partido gobernante. Desde 1997 y hasta el 2018, ningún Presidente de la República tuvo las cámaras con mayoría simple ni absoluta, tenían primeras minorías. Para construir el presupuesto, la ley de ingresos, leyes secundarias, reformas constitucionales, el Ejecutivo tenía que ir a la Cámara a dialogar con los diputados, a respetar al Poder Ejecutivo; veíamos a los gobernadores ir a la Cámara a llevar proyectos de inversión para acceder al presupuesto federal; hoy no hay forma de mover el presupuesto porque la mayoría simple con sus aliados la tiene Morena.
-Vienen elecciones el próximo año, la gubernatura y el Congreso del Estado, ¿Qué se espera de Morena?
Va a venir a competir, ellos tienen la Presidencia de la República y 22 estados del país, luego podremos hacer una revisión de qué tan bien han gobernado esos estados: ver indicadores de seguridad, agua, derechos obtenidos, disminución de delitos de alto impacto y ponerlos en una balanza. Coahuila tiene sus problemas, el tema es cómo los enfrentamos trabajando gobierno y sociedad para disminuir o eliminar el problema.
Abramo Masso, ex alcalde y tres veces diputado federal, ha dedicado gran parte de su vida a la política y el servicio público, labor que ha sabido compaginar con la responsabilidad familiar, donde el soporte son Bertha, su esposa, y sus hijas Valentina, de 19 años, de carácter fuerte y noble; Vicky, de 16 años y gran percepción social y humana, y Jericó, de 15, aficionado a la tecnología, la aviación y a quien le molestan las injusticias.
“Soy hombre de familia, mi familia lo es todo para mí, no habría llegado a ninguno de los espacios que he llegado, si no hubiera tenido la estabilidad emocional que te da una mujer como la que tengo, una mujer fuerte a mi lado, que me sostiene cuando me caigo, me levanta cuando me tropiezo, me regaña cuando me equivoco y que me motiva cuando necesito un empujón. Es una columna vertebral de mi familia, sin ella no sería lo que soy, cuando ya no encuentro fuerzas me las da. A veces que me siento solo, me dice ‘no necesitas más que a tu familia’.
“Cuando me han cerrado las puertas, ellos son los que me permiten abrirlas de corazón, que no guarde rencores en el corazón. Siempre me han dicho: guardar rencores nomás te carcome hacia el interior, no odies, no busques desear mal a nadie”.
El pasado 10 de diciembre, VANGUARDIA publicó un adelanto de esta entrevista, en la cual el diputado federal afirma tener un sueño: ser gobernador de Coahuila.
Por ello, de cara a 2023, Jericó Abramo se dice preparado.
“Estoy listo para lo que venga, tengo la preparación, tengo 26 años de servicio en pro de los coahuilenses, conozco los 38 municipios de Coahuila, sus fortalezas y debilidades, la problemática que hay que enfrentar, sé lo que se tiene que hacer en materia de seguridad, economía, infraestructura y desarrollo humano”, afirmó.
Abramo se mostró a favor de una encuesta interna, ya que consideró que es un método que evitaría la división interna.
“Si Jericó queda en primer lugar, sumaré a todos los aspirantes a hacer un proyecto de Estado, con un gobierno de coalición, donde tiene que estar incluido el PAN, el PRD, los ciudadanos y el PRI. Si Jericó no es el primer lugar, y el primero es Manolo Jiménez, Chema Fraustro o Román Alberto Cepeda, yo lo voy a apoyar”, remató.