‘No es una alcantarilla, es nuestro hogar’; migrantes llevan 2 años como ‘vecinos’ de la Presidencia de Saltillo (video)

A los 10 años, Dilan salió de Cuernavaca en el estado de Morelos con la intención de cruzar hacia Estados Unidos, pero por “ingobernable” se separó de su madre y comenzó a vivir en Saltillo.

Cuando tenía 12 años, la zona de tolerancia en la colonia Guerrero se volvió su hogar y centro de trabajo. Afirmó que hace 15 años fue una de las primeras chicas transgénero que se prostituyó en la capital de Coahuila.

Su sitio cambió entre el motel Corona y la plaza “de los huevones” para después llegar a la avenida Presidente Cárdenas, donde siguió el oficio en la nueva ubicación del Bar Madrid.

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A escasos metros de la presidencia municipal, del Palacio del Congreso y del Palacio de Justicia, Dilan Osiel Moreira, de 27 años, decidió vivir junto a “Chucky” en una alcantarilla a la que se puede acceder bajando la banqueta de la avenida.

“He vivido en los anexos, he vivido en refugios, pero como adicto, pues siempre buscamos las oportunidades más fáciles y pues llegué a vivir en esta coladera hace aproximadamente como dos años”, señaló Dilan en entrevista para VANGUARDIA.

“Chucky”, quien en realidad se llama Carlos, es su “compañero”, también es migrante y es originario de Honduras. No pudo platicar con este medio, pues de acuerdo a Dilan, está pasando por un proceso de abstinencia para dejar las drogas y el alcohol.

Dilan contó que en la zona ya son conocidos pues juntan basura, barren banquetas y lavan coches. “No andamos robando ni nada. Simplemente somos unas personas foráneas que como todos necesitan el apoyo y el sustento. Como todo ser humano y pues desgraciadamente caímos en las garras del alcoholismo”, aseguró.

‘ESTÁ CÓMODO ADENTRO’

VANGUARDIA pudo acceder a la alcantarilla que ocupan los migrantes constatando que, efectivamente, hay espacio suficiente para dos personas.

El lugar se encuentra lleno de cobijas, botes de cerveza, una botella de Tonayan, cobijas quemadas, restos de relleno de un sillón, un banco de plástico, un cable del que cuelga ropa, trozos de madera, restos de un ventilador y botellas de plástico.

A pesar de que el espacio que ocupan Dilan y “Chucky” está diseñado para encauzar el agua de lluvia hacia el sistema de alcantarillado, Moreira aseguró que lo han adaptado para que sea cómodo.

“Está cómodo adentro. Independientemente de que es una alcantarilla. Hay tres góndolas, tres espacios y cada espacio tiene su bunque, su cama. Tenemos agua, tenemos todos los servicios, tenemos luz. Salimos a recoger agua en los botes y luz porque con una extensión nos colgamos de la luz del vecino. No hay ratas como dicen porque mantenemos limpio”, expresó mientras saluda a otra persona en situación de calle que le limpia los vidrios a los coches estacionados en la plaza comercial ubicada en el cruce de Presidente Cárdenas y Álvaro Obregón. Le pidió dejar de tomar.

Explicó que la distribución de su hogar es que en una primera góndola corre el agua, en la segunda viven ambos y en la tercera tienen sus cosas de valor, es decir sus cobijas y su ropa.

“Todos podemos vivir en paz y felices. No es simplemente una alcantarilla, para nosotros es un hogar, el cual pues vamos a cuidar día y noche porque nos ha costado años, no días, años de que toda la basura salga bien, de que no se tape cuando haya lluvia ni nada”, expresó Dilan con firmeza.

‘FUE UNA NOCHE LOCA Y DE COPAS’

A todo mundo le gusta estar alegre, inconsciente o feliz, dejar de sentir. Todo mundo llega a un punto en la vida en el que ya no quiere nada. Por eso dijo Dilan haber caído en el alcoholismo.

Sintió haberlo tenido todo. Hombres, dinero, placer, droga, una vida y aún así no llenaba. La alcantarilla no solo guarda sus cosas de valor, sino también los rastros de sus intentos de suicidio.

“Yo me sustanciaba para no sentir. Nada me llenaba, o sea, no me encontraba sentido. Y ahora que vuelvo en sí, bajo un poco de conciencia, pues digo, mejor le paro mi pedo y le echo acción a la vida. Porque no todo es vivir así, ni vivir como antes. No cambiaría lo pasado. Pero sí remediaría muchas cosas para hacer el bien”, dijo.

Aseguró que en algún punto la prostitución ya no fue ni necesidad ni gusto, sino hobby. Era una forma fácil de conseguir dinero y aparte un arte en el proceso de vestirse y maquillarse. Eran las luces de Nueva York, dice, mientras un taxista le saluda al pasar.

Dilan aclaró que nunca lo violaron, sino que él decidió ser transgénero y prostituirse. Aseguró que nunca ha tenido una enfermedad venéra pues siempre usó preservativo, ya sea para sexo oral o completo, precacuciones que comparte con otras sexoservidoras.

“Pero a la vez no es agradable esta vida, porque de repente te das cuenta que es pura tristeza”. Dilan cuenta que en fue en sus tiempos de prostitución que no solo conoció a “Chucky”, sino que también cayó en el alcoholismo. “Chucky” fue su cliente, aunque aseguró que nunca hubo sexo entre ambos.

“Nos conocimos en una noche de pasión y de lujuria. Él era mi cliente, es buena persona. Nunca hubo sexo ni nada. Siempre fue más que nada comunicación. Me daba vino. Me daba la bebida”, expresó.

Agregó que siempre los han tachado de cristaleros aunque más bien son “teporochos”, pues el foco está bien caro y más que otra cosa les gusta el alcohol.

“Fue una noche de copas, una noche loca, pues surgió lo que tenía que pasar y pues nos quedamos juntos y de repente él se quedaba, yo me iba y así, entre los dos. Pero nunca molestando a la sociedad, porque ante la sociedad somos un peligro. Porque así nos tachan, como lo peor”, añadió.

Dilan expresó que se quedó con “Chucky” por su forma de ser, pues aunque no puede ver con un ojo y está cojo, “es bien humilde y no roba”. Mencionó que mucha gente tiene recursos y no tiene el grado de humildad que sí tiene “Chucky”.

Además aseguró que Saltillo los ha recibido de buena manera, por lo que ambos decidieron quedarse en la ciudad.

“Es bien acogedor este lugar. Para nosotros ha sido una bendición llegar aquí porque pues nadie nos ha hecho males. No nos hemos metido en problemas, de hecho no tenemos récord criminal en ninguna parte. Saltillo es un pueblo de muchas esperanzas y muchas oportunidades en que uno puede salir adelante”, dijo.

“Yo no me quejo de Saltillo, no tengo queja alguna, al contrario, soy bien agradecido con el Estado y con las personas, con la sociedad, porque nos ha brindado su apoyo incondicional”, señaló Dilan.

MUNICIPIO YA ATIENDE EL CASO

El Municipio de Saltillo informó que desde hace varias semanas ya ha atendido el caso de Dilan y “Chucky”, principalmente a través de Protección Civil, bomberos y el DIF.

Alberto Neira Vielma, director de PC y bomberos de la ciudad, expresó que ambas personas tienen “un trastorno o problema mental”, por el que no permiten que se les brinde algún tipo de apoyo.

“Se les ha ofrecido traslado a los refugios con los que colabora el Municipio, para lo cual no han accedido. Se les ha ofrecido en temporada invernal cobijas, bebidas calientes y muchas de las veces llegan incluso a agredir al personal que atiende este tipo de reportes”, agregó Neira.

Mencionó que se monitorea constantemente la zona por la seguridad de las personas alrededor, pero también por si en algún momento quieren aceptar algún tipo de apoyo, limitando hasta ese punto su capacidad como cuerpo de bomberos.

Neira explicó que este tipo de casos se atienden cuando se quema algún tipo de material o desechos, situación que alarma a las zonas aledañas y para lo cual se atiende la situación de emergencia.

Asimismo, el área de PC monitorea ese tipo de zonas principalmente cuando hay bajas temperaturas o lluvias, coordinándose con siete refugios que ofrecen una capacidad promedio para 20 personas cada uno.

“Se ofrecen a personas que pasaron por aquí por Saltillo y no tuvieron algún otro lugar para quedarse. Los refugios juegan un papel importante para el apoyo a la ciudadanía. En este caso, cobran un mayor auge en las temporadas principalmente invernales y en las temporadas de lluvias, donde los factores de riesgo se incrementan para las personas en situación de calle”, indicó.

Señaló que no solo se hace con personas que viven en alcantarillas, sino en otras situaciones de vulnerabilidad como quienes construyen asentamientos irregulares cerca de arroyos.

“Desafortunadamente, una buena parte de estas personas se niega a recibir estos apoyos y pues de forma ahora sí que obligada no podemos llevar a cabo los traslados”, aclaró.

Explicó que año con año el personal de PC implementa el operativo “Lluvias, Huracanes y Zonas de Riesgo”, que se encuentra en fase preventiva que corresponde los recorridos, notificación y emisión de recomendaciones de personas que viven en zonas aledañas a áreas de inundación.

Agregó que la cantidad de traslados varía dependiendo de la cantidad de frentes fríos y lluvias que se presenten por temporada, pues en muchas ocasiones las personas en situación de calle toman lugares de difícil acceso o visibilidad.

“Suelen resguardarse en lugares donde no son de fácil identificación o acceso, entonces en este caso también prácticamente pasan desapercibidos para la autoridad e inclusive para la ciudadanía”, explicó.

Puntualizó que el pasado mes de diciembre, Protección Civil pudo realizar el traslado de hasta siete personas.

JUNTOS ENFRENTAN LOS RIESGOS

El saltillense por adopción aseguró que al recoger la basura de la zona no ha habido quejas de vecinos, incluyendo la sucursal de BBVA sobre la que se encuentra la alcantarilla.

No obstante, también dijo que el pasado martes 12 de marzo, cerca del mediodía varios policías intentaron sacarlos incendiando la alcantarilla y agrediendo físicamente a “Chucky”.

VANGUARDIA pudo constatar que la mañana de este miércoles, el sitio emitía un olor a quemado, no obstante la autoridad confirmó que atendió un reporte de incendio.

“Nos querían correr, pero pues no nos pueden correr, porque pues independiente que sea federal o lo que sea, no estamos haciendo nada malo. Ahorita sí pedimos el apoyo y el sustento, pues a las personas que nos escuchan o nos quieren ver o nos quieren conocer pues para salir adelante ahorita. Buscamos un cuartito de renta y pues más que nada para comer”, dijo.

Dijo tener sus documentos en regla pero a partir de una detención de la que señaló que tuvo que pagar mil 500 pesos, no le han querido dar trabajo.

Al realizar la entrevista este miércoles 12 de marzo, de una patrulla de la policía municipal descendieron dos oficiales quienes preguntaron a Dilan por “Chucky”, les revisaron sus folletos obtenidos ese mismo día en el DIF y posteriormente se retiraron.

Dilan también dijo que este miércoles personal del Municipio de Saltillo, “del instituto de Mujeres”, se acercó a ofrecerles apoyo para poder reubicarse mientras limpian toda la alcantarilla, asegurando que ha asistido en distintas ocasiones al DIF.

“Ya fui a las instituciones de aquí cerca para que no nos hagan nada, porque pues no somos personas delincuentes ni nada. Nosotros lavamos carros aquí en la noche y pues reclutamos la comida. De hecho, pues no hay ni basura porque nosotros nos encargamos de barrer las calles para que no haya basura y no esté contaminado y no haya quejas”, señaló.

También indicó que si se les ofrece un albergue o un cuarto de renta al que puedan llegar a algún acuerdo, se van “inmediatamente”.

“Nada más que sea un acuerdo, no que nada más nos estén golpeando y amenazando, porque pues así no”, aseguró.

‘DIOS POR ALGO NOS TIENE ASÍ’

Dilan aseguró que tiene más de un año sobrio y sin prostituirse, además de haber ayudado a “Chucky” y otras personas en situación de calle para salir de sus adicciones.

No cree en los anexos, cree en Dios. Aseguró haber sufrido abuso sexual y violencia física en un anexo, por lo que señala que no son necesarios, solo se ocupa quitarle la “sustancia” a la persona.

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“Yo digo que Él por algo nos tiene así. Él por algo permite todavía que uno siga viviendo así, porque algo está mucho mejor por venir. Yo tengo fe y confianza en que sí se puede y que vamos a salir adelante. Si ya personas que convivían con nosotros están recuperados, sin grupos, sin nada, ¿cómo nosotros no?”, aseveró.

“A raíz de regaños, a raíz de correrlos, a raíz de que no les hemos ayudado en conseguir sustancia, ellos han cambiado y pues están las pruebas, hay muchas pruebas que ya han cambiado muchas personas. Ya no hay tanto indigente aquí alrededor, ya no se quedan en el teatro, ya muchos están en grupos, muchos están en refugios o en un trabajito”, dijo.

A lo mejor uno es una manera de inspiración para ellos de que deben de salir adelante. “’Chucky’ se negó, se negó y se negó a tomar sustancia hasta que lo logramos. Es la finalidad de nosotros, como le digo a ‘Chucky’, si nosotros somos escalón para que otras personas avancen, pues de perdida, pero dejar una huella y un legado que lo que estuvo mal, se hizo el bien’”, puntualizó Dilan.