Piden reforzar seguridad ante alerta de tormentas y tornados en Coahuila

Entre 1999 y 2018, las tormentas, ciclones tropicales, tornados, sequías e incendios forestales que impactaron en Coahuila requirieron que los gobiernos federales destinarán al estado 988 millones 657 mil pesos para atender los fenómenos naturales y los daños provocados en viviendas e infraestructura urbana.

Los ciclones tropicales que impactaron en Coahuila ocasionaron los mayores destrozos en ese lapso y a través del Fondo de Desastres Naturales se canalizaron 406 millones 262 mil pesos; las tormentas demandaron 372 millones 596 mil; los incendios forestales 162 millones 813 mil; los tornados 46 millones 980 mil.

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El diputado Álvaro Moreira Valdés (PRI) explicó que de acuerdo con el Atlas de Vulnerabilidad ante el Cambio Climático, elaborado por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, el 87 por ciento de los 38 municipios del estado presentan algún grado de vulnerabilidad ante inundaciones y en todos hay condiciones para la ocurrencia de deslaves.

“Las condiciones de lluvias intensas han comenzado a presentarse en nuestro territorio. Hace unos días, los habitantes de la Región Carbonífera fueron sorprendidos con intensas tormentas que dieron paso a ráfagas de viento y aguaceros constantes, siendo los municipios de Sabinas y Múzquiz los más afectados”.

“En tanto, el Servicio Meteorológico Nacional continúa proyectando lluvias puntuales fuertes para la entidad e incluso, alerta sobre la probabilidad de formación de torbellinos o tornados”.

Añadió que los ayuntamientos juegan un papel importante para hacer frente a las múltiples tareas y retos pendientes en sus territorios a consecuencia del cambio climático y son la autoridad inmediata en materia de protección civil y aplicación de medidas de seguridad.

Es indispensable que, con base en el análisis de riesgo de cada municipio, los ayuntamientos fortalezcan las acciones que permitan la oportuna detección e identificación de zonas de riesgo ante los efectos de las lluvias y tormentas que se pronostican, a fin de implementar de forma temprana las alertas y difusión de medidas preventivas ante la población, a fin de garantizar la protección de las familias y de su patrimonio.

“Cada año, México experimenta diversas manifestaciones climáticas que ocasionan severos daños, pérdidas materiales y pérdidas de vidas humanas. Una de las mayores fuentes de riesgo son los fenómenos hidrometeorológicos causados por ciclones tropicales, lluvias extremas, inundaciones, tormentas de nieve, granizo, heladas y tornados”.

“Generalmente, la temporada de lluvias en México inicia el 15 de mayo y termina el 30 de noviembre, coincidiendo con el inicio y final de la temporada de ciclones tropicales, sin embargo, la Comisión Nacional del Agua señala que en la zona noreste suelen presentarse alrededor de la segunda semana de abril y en Coahuila, las tormentas y ciclones son los eventos de desastre asociados al clima con mayor frecuencia”, refirió.