Rastrean científicas de la UAdeC metales contaminantes en aire de Saltillo
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El pasado mes de febrero, las científicas de la Universidad Autónoma de Coahuila, Iliana de la Garza Rodríguez y Mara Sarahí Florencio Martínez, iniciaron una campaña de monitoreo de la contaminación del aire en Saltillo, en donde buscan detectar presencia de metales contaminantes.
El grupo académico de Química Analítica Ambiental de la Facultad de Ciencias Químicas liderado por de la Garza, pretende recolectar material particulado en las cuatro estaciones del año para determinar la concentración de al menos diez metales.
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Entre ellos se encuentran el aluminio, cadmio, cobre, hierro, manganeso, níquel, plomo, potasio, sodio y zinc.
Los resultados obtenidos, se utilizarán para la tesis doctorales de Florencio Martínez y pretenden “aportar información confiable que permita formular nuevas políticas públicas que protejan la salud de la población y de los ecosistemas”.
En entrevista para VANGUARDIA, la doctora de la Garza mencionó que el material particulado proviene de “las emisiones que nosotros generamos o del viento que arrastra el suelo y lo levanta. Al ser de un tamaño muy pequeño puede estar flotando mucho tiempo”.
Además, la académica Florencio Martínez explicó que la recolección de material particulado se realiza principalmente en el techo del edificio principal de la FCQ, aunque también se ha colocado el monitoreo en los distintos campus de la UAdeC.
Además contaron que “desde 2015, se cuenta con una estación meteorológica la cual mide la velocidad y dirección del viento, presión barométrica y porcentaje de humedad”.
Agregó que en bajas temperaturas que se presentan regularmente en las mañanas, o bien, cuando ocurre el proceso de “inversión térmica” es cuando el material particulado “no se mueve tanto y es cuando más lo respiramos”.
Según la doctora Iliana de la Garza, “el material particulado está constituido de sólidos y líquidos que pueden variar de tamaño, forma y composición de acuerdo con la fuente que lo emite”.
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Asimismo, agregó que “lo más importante para realizar el monitoreo de la calidad del aire es generar y proporcionar información confiable de los niveles de contaminación en el aire a los principales actores que pueden tomar decisiones adecuadas para el desarrollo de políticas y estrategias que mejoren el ambiente”.
En información compartida a VANGUARDIA, la doctora de la Garza Rodríguez mencionó que la estación de monitoreo del aire que se encuentra en la Secretaría de Finanzas tiene uno de los mejores equipos para la labor pues tiene la característica de ser automático.
No obstante, la Secretaría de Medio Ambiente de Coahuila, misma que opera la estación, a través de su titular Eglantina Canales, afirmó la semana pasada para VANGUARDIA que sí se necesitan al menos otras tres estaciones en el área conurbada de Saltillo.
RIESGOS PARA LA SALUD
La Organización Mundial de la Salud considera al plomo como uno de los 10 productos químicos que más preocupan a la salud pública.
De acuerdo al sitio web de la OMS, “la exposición al plomo causa anemia, hipertensión, disfunción renal, inmunotoxicidad y toxicidad en los órganos reproductores. Se cree que los efectos neurológicos y conductuales asociados al plomo son irreversibles”.
Asimismo, de acuerdo con el artículo “La exposición al aluminio y su relación con el ambiente y la salud” de Rosabel Torrellas Hidalgo, “la respiración del aire con altas concentraciones de aluminio produce en los animales daños pulmonares y pérdida de peso, entre otros efectos”, (Bouchard, 2009; Driscoll, 1990; Nayak, 2002; Kumar, 2009).
A su vez, la doctora de la Garza Rodríguez afirmó en entrevista que si bien se encontró en “bajas concentraciones” y puede atribuirse a condiciones climáticas, en las primeras semanas del estudio se llegó a encontrar titanio. No obstante, la científica aseguró que no es una muestra científicamente determinante.