Confinamiento doble: ¿Cómo sobrevivir en cuarentena siendo gay de clóset?

En las medidas de confinamiento contra la propagación del coronavirus, hay quienes viven sus días doblemente encerrados.

El encierro de Orlando gracias al covid-19 es así. Mientras las puertas de su casa y la de sus padres deben permanecer cerradas el mayor tiempo posible para doblegar a las curvas de crecimiento epidemiológico, su orientación sexual debe permanecer en un silencio que habita en medio de la convivencia obligada.

Fue a finales del mes de marzo, cuando el subsecretario de salud, Hugo López-Gatell dijo a la sociedad mexicana de manera reiterativa, que la única manera de ganar una lucha contra la pandemia, era quedándose en casa.

En medio de la cuarentena, los padres de Orlando insisten preguntándole la hora en que presentará una novia en la cena, aunque tienen sospechas de su homosexualidad. Y desde el 4 de abril, en medio de una pelea sobre la diversidad sexual, que las cosas, dice, se volvieron incómodas. Dice, que el miedo de decirles, se origina en que las propias tradiciones religiosas, donde los juicios a la comunidad LGBTTTIQ pueden llegar a ser una constante. Pero él sólo es un ejemplo.

Orlando tiene 29 años y trabaja en el rubro de la hotelería, y no conoce a Javier, otro joven estudiante de 21 años en Saltillo, pero ambos padecen la misma situación que es más parecida a un doble confinamiento. Para Javier, la temporada de la cuarentena en la cuarentena aun cuando desde hace seis años definió su orientación. Dice, que hay momentos en los que siente que sus acciones son perseguidas.

A diferencia de la sociedad heterosexual, Javier valora la calle y la convivencia, como un lugar donde puede expresarse sin ser juzgado, y sin temor al rechazo; es ver el sol después de su vida en el closet, aunque asegura, que no es culpa de sus padres los dogmas que han sido impuestos a la sociedad en general, y que aun con la situación, siguen siendo sus seres más admirados.

De acuerdo con la organización San Aelredo, se estima con datos oficiales, que en México, hasta un 10 por ciento de la población podría formar parte de la comunidad LGBTTTIQ; sin embargo, no existe un medio que indique cuántas de las personas viven en el closet, aunque la cantidad puede ser muy grande aun en 2020.

En ese sentido, la ONG llamó a las familias a tener información de primera mano sobre cómo sobrellevar las emociones cuando los padres se enteren que hay diversidad sexual en casa, pues esto puede evitar grandes riesgos en la estabilidad emocional y el futuro de las personas.