El puente olvidado de Saltillo, en su momento fue símbolo de modernidad
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Testigo mudo del inicio de la modernización en Saltillo al ser uno de los pocos pasos vehiculares para librar las vías del ferrocarril, el puente Mixcoac hoy luce en el abandono de autoridades, deteriorado en su estructura y con riesgo para automovilistas y peatones, además de representar un lugar de reunión de pandilleros.
Localizado al sur oriente de Saltillo, en la calle Mixcoac, en el barrio de la Cuadra Colorada, entre Felipe Berriozabal y calle Salazar, el puente vehicular sobre las vías del ferrocarril, a unos metros de la estación ferroviaria no tiene placa de inauguración y los historiadores locales no cuentan con una fecha clara en la cual se hay construido y puesto en operación.
Lo cierto es que esta infraestructura fue construida para continuar la vialidad de la calle Mixcoac y que siguiera la conexión entre poniente y oriente de la ciudad en el sur ante la presencia de las vías del ferrocarril.
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Sin embargo, la estructura, que pudiera ser de antes de 1970, de acuerdo con datos de fotografías y habitantes del sector, luce dañada por más de 50 años de existencia.
Además los habitantes del sector, entre ellos María Sánchez y José Villaseñor, explicaron que desde hace más de dos años están solicitando vigilancia en ambos extremos del puente por la presencia de pandilleros, personas que acuden a drogarse y alcoholizarse.
En la administración municipal anterior se hizo una solicitud, explicaron, para que se colocara al menos una caseta de policía de las móviles a fin de resguardar la zona porque la vigilancia más cercana se encuentra hasta el Parque de Beisbol “Abraham Curbelo”, en la colonia Guayulera.
En este sector habitan vecinos de la calle Salazar, Obregón, Mixcoac, Guayulera, Río Verde, del Valle, entre otras, que de manera continua están solicitando vigilancia.
En un recorrido realizado por VANGUARDIA se pudieron constatar daños evidentes en la infraestructura por filtraciones de agua en las juntas y en toda la estructura de los cimientos.
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También el puente carece de luminarias suficientes, el barandal es endeble y está a punto de caerse, incluso hay zonas en donde no es el material original y sólo se hicieron “parches” de acero para mantener el barandal, sin embargo la parte de donde se fija la estructura metálica está deteriorada y esto representa un peligro para automovilistas y transeúntes.
La semana pasada un conductor de una camioneta cayó al precipicio al derribar el barandal de protección, con lo que se comprueba lo endeble de la estructura.
El puente Mixcoac no cuenta con banquetas para el paso de peatones y hay que subir escaleras para tomar sólo un tramo y librar las vías del ferrocarril, sin embargo, las escaleras también están con daños, principalmente por la corrosión de la estructura y la falta de mantenimiento.
Otro punto negativo es que del lado poniente del puente hay maleza, basura y graffiti por la nula vigilancia, en el lado oriente los vecinos se han encargado de aplicar pintura en algunos sitios y utilizan la parte baja como estacionamiento.
También este puente significa una de las pocas conexiones vehiculares entre el oriente y poniente de la ciudad en el sur, pues después de la calle Miguel Ramos Arizpe la siguiente vía al sur que une al poniente y al oriente es el puente Mixcoac, de ahí en adelante hay varios kilómetros sin paso hasta el periférico Luis Echeverría hasta la altura de las curvas o ladrilleras en el arroyo del Pueblo.
La calle Mixcoac es emblemática para Saltillo y aparece en los mapas de la ciudad desde 1835, sin embargo es hasta el mapa de 1934 cuando aparece la llamada Cuadra Colorada, distinguida por ser casas de la misma forma y tamaño, y que estaban pintadas de en el mismo tono.
A esta calle también se le conoció en el pasado como el callejón del Obispo, esto debido a la leyenda de que a finales del siglo XIX un sacerdote fue degollado en la zona para robarle un cáliz y otros objetos de oro con los cuales salía a oficiar misa; la tradición oral señala que el clérigo deambula por la noche y se aparece en los techos de las viviendas.