Semanario: Salvar o destruir Cuatrociénegas, al valle le restan 10 años de vida

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600 ejidatarios pelean por las aguas milenarias que, dan vida a sus parcelas. Consideran que la mayoría del agua se está entregando sin un sustento jurídico
Ejidatarios luchan por abastecerse de agua; ambientalistas buscan la conservación. Conagua no logra conciliar. Mientras tanto, uno de los humedales más importantes del mundo se seca
En las entrañas del desierto Coahuilense se halla una ironía o un milagro –depende de quién lo cuente–, uno de los humedales más importantes de México: el valle de Cuatrociénegas.
Le quedan 10 años de vida a sus más de 700 mil especies endémicas, cualidades únicas de agua, sus 84 mil hectáreas y paisajes oníricos protegidos.
La pregunta está ahí, pero nadie parece querer encararla de frente con la seriedad que amerita: ¿cuáles serían las consecuencias de perder una joya natural como el valle de Cuatrociénegas en una tierra árida como el centro de Coahuila?