Tec Saltillo: estas son las causas que detonaron la protesta
La instalación de una zona VIP durante el concierto del Grupo Frontera, el jueves anterior fue la gota que derramó un vaso que había venido llenándose de inconformidad, revelan testimonios recabados por VANGUARDIA
La inconformidad comenzó a germinar entre los integrantes de la comunidad estudiantil del Instituto Tecnológico de Saltillo (ITS) desde el medio día del pasado jueves 14 de septiembre, cuando la administración de la escuela, encabezada por su directora María Gloria Hinojosa Ruiz, informó de la suspensión de clases a partir de la 1 de la tarde. ¿El motivo? La realización del concierto de Grupo Frontera, esa noche, en el cruce del Bulevar Venustiano Carranza y Avenida Universidad.
El concierto no tendría lugar en las instalaciones del ITS, pero en su escalinata frontal se tenía prevista la colocación de una zona VIP para un selecto grupo de invitados al concierto organizado, con motivo de las fiestas patrias, entre el Gobierno de Coahuila y el Ayuntamiento de Saltillo.
TE PUEDE INTERESAR: ¿Qué exigen los alumnos del Tec Saltillo, además de la renuncia de la directora?
Tras una serie de conversaciones con alumnos y exalumnos del ITS, así como familiares de estos, quienes hablaron para VANGUARDIA a condición del anonimato, reconstruimos los hechos previos a la manifestación que ha mantenido cerrada, por más de 24 horas, la avenida más importante de la capital de Coahuila.
De acuerdo con los testimonios recabados, al aviso de suspensión de clases le siguió un “operativo” para asegurarse de que no quedara ningún alumno dentro del edificio principal. En dicho operativo, se asegura, participaron elementos de seguridad pública, presumiblemente de la Policía Municipal de Saltillo.
“Lo que querían era limpiar los baños y asegurarse que nadie los usara antes de que iniciara el concierto”, dijo una de las personas entrevistadas, quien forma parte de la comunidad estudiantil y aseguró que, “como nunca”, los baños fueron aseados y se colocó papel sanitario.
La falta de limpieza y papel sanitario en los baños forma parte de los reclamos de la comunidad estudiantil y una de las pancartas pegadas en la reja frente a la fachada del ITS retrata con ácido humor el hecho: “Regrésenme los calcetines que perdí por falta de rollo #nomascorrupción”, reza el cartel.
Al día siguiente, cuando los alumnos regresaron a clases, encontraron los vestigios de la parranda por todas partes. En los chats comenzaron a circular fotografías de los baños sucios y con los depósitos de basura rebosantes de botellas vacías de distintas bebidas alcohólicas, así como envases de refrescos.
TE PUDE INTERESAR: ‘Es una manifestación sana y pacífica’, madres de alumnos del Tec Saltillo piden apoyo a movimiento
“Se pasearon con todo y bote de cerveza por los pasillos del edificio principal”, se lee en una de las composiciones fotográficas que hizo circular un alumno y en la cual se observan los baños sucios, una lata de cerveza a un lado de un inodoro y basura cubriendo el área de lavabos. En otras imágenes se aprecian depósitos de basura llenos de latas de cerveza, envases de agua mineral, refrescos y una botella de ron. También circularon fotos de la escalinata principal la cual se encontraba cubierta de basura a la mañana siguiente del concierto.
El malestar fue creciendo a lo largo del fin de semana cuando comenzaron a circular imágenes de las personas que ocuparon la zona VIP.
Tales imágenes encendieron el ánimo de los estudiantes porque les recordaron las muchas prohibiciones a las cuales se encuentran sujetos como integrantes de la comunidad del ITS y que son justificadas con el argumento de proteger la imagen de la institución así como la integridad del edificio.
¡Está prohibido!
“Nosotros no podemos ni sentarnos en los escalones de la entrada principal”, dijo una de las personas entrevistadas quien aseguró que en cuanto alguien se sienta allí, un guardia le exige que se levante. “¿Por qué nosotros no podemos hacer eso y otras personas sí?”, cuestionó la fuente.
Un usuario de Facebook, “Eduardo Carranza Conferencista”, parece confirmar la especie con un post publicado en su página de la red social la mañana de este martes: “Hace años solicité permiso para organizar una de mis carreras 7K EDUCALO en V. Carranza y Av. Universidad, pidiendo la explanada del Tec Saltillo para llevar a cabo la premiación, sólo la premiación, sin instalar ningún tipo de tarima y sin abrir las instalaciones de la institución, el permiso fue rechazado bajo el argumento que con nuestras pisadas y la colocación de los tres cajones de premiación podríamos dañar el piso de adoquín”, afirma.
TE PUEDE INTERESAR: Exigen alumnos del Tec Saltillo que mejoren instalaciones del campus; se reúnen con dirección del plantel
Ni hablar, aseguraron las fuentes, de introducir bebidas alcohólicas al plantel. “Nunca nos han dado permiso, ni cuando hemos organizado bailes para recaudar fondos”, aseguró un exalumno vinculado, en su momento, a la sociedad de alumnos de la institución.
El rigor de la prohibición es retratado por la usuaria de Facebook “Pao EsHer” quien señala, en un post publicado el lunes anterior, que “a un director el ciclo pasado lo ‘suspendieron’ por ingresar con una lata de cerveza que usaba para preparar una discada que venderían en una kermés”, lo cual le lleva a cuestionar por qué los servidores públicos que estuvieron en el área VIP sí podían ingerir bebidas alcohólicas en los terrenos de la institución.
De allí al hashtag #ElTecNoEsCantina, solo mediaron unos cuantos clicks.
Pero el relajamiento de la prohibición para ingerir bebidas alcohólicas parece haber sido sólo la gota que derramó el vaso. La animosidad contra la directora del plantel, cuyo cese ha sido convertido en la principal demanda de los estudiantes, venía incubándose desde antes.
Uno de los aspectos señalados por diversos entrevistados es la prohibición de que los alumnos vendan artículos dentro de la institución. “Algunos, sobre todo los foráneos, venden galletas, rebanadas de pizza o de pastel para tener ingresos y solventar sus gastos”, explicó una de las personas entrevistadas. La actual administración prohibió tal práctica pretextando que “dan una mala imagen”.
La realidad, dijo la fuente, sería otra: “los concesionarios de las cafeterías se quejan de que les hacen competencia los alumnos y como pagan por el espacio que tienen dentro de la escuela, le piden a la directora que impida la venta de productos comestibles”, aseguró.
Otros señalamientos
Además de los aspectos antes enumerados, los alumnos inconformes reclaman que no se ha emprendido ninguna acción relevante para atender las denuncias de acoso sexual presentadas por varias alumnos de la institución.
VANGUARDIA publicó, en junio de 2019, la denuncia de una egresada de la carrera de Ingeniería en Gestión Empresarial la cual aseguró haber sido objeto de acoso por parte de un catedrático de la institución quien, al decir de ella, era uno de los que “tenían fama” de incurrir en tales conductas.
La situación continúa a la fecha, aseguran alumnas con quienes se conversó, pero la mayor parte de las víctimas tienen miedo y prefieren no denunciar los hechos porque no creen que se vaya a castigar a los profesores abusadores, o temen ser víctimas de peores represalias.