Comunidades rurales de Viesca y Matamoros en alerta por crecida del río Aguanaval
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MATAMOROS, COAH.- El aumento en el caudal del río Aguanaval, que este martes por la mañana superó los 200 metros cúbicos por segundo y mantiene una tendencia creciente, ha puesto en alerta a autoridades de Protección Civil en Coahuila.
Las autoridades han intensificado el monitoreo de comunidades rurales ubicadas en los márgenes del afluente, principalmente en los municipios de Matamoros y Viesca.
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Hasta el momento no se han registrado afectaciones graves ni evacuaciones, pero el nivel del río se mantiene bajo vigilancia constante, debido al riesgo que representa el flujo acelerado en una zona donde la tierra ya se encuentra saturada de humedad, lo que provoca mayor escurrimiento superficial.
Las comunidades bajo observación en Matamoros incluyen Fresno del Sur, El Barreal, Congregación Hidalgo, Sacrificio, Irlanda, San Pablo, San Francisco, San Felipe Aguanaval y Santo Niño Aguanaval, además de El Refugio, El Dólar, Redención Agraria y Petronilas.
En el lado de Viesca, se mantiene especial atención en poblados como Nuevo Reynosa, Buena Vista, Tierra y Libertad, Villa de Bilbao, Gabino Vázquez, Hacienda de Hornos, Flor de Mayo, La Ventana, La Rosita, San Isidro, La Noria, Gilita, San Manuel, La Fe y Zaragoza.
La recomendación de Protección Civil a la población es clara: evitar acercarse a la corriente o intentar cruzar el cauce, ya que el flujo del agua es impredecible y peligroso.
APROVECHAN AGUA PARA SUS CULTIVOS
Pese al riesgo, campesinos de ambas regiones han visto una oportunidad en la crecida del Aguanaval, movilizándose para desviar parte del caudal hacia sus parcelas y estanques.
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Esta medida busca aprovechar el agua para siembras de temporal, en una zona caracterizada por las dificultades hídricas.
De manera inmediata, agricultores comenzaron a canalizar el agua para preparar sus tierras, mientras las autoridades insisten en que estas actividades se realicen con precaución y bajo supervisión comunitaria para evitar accidentes.
