Trabajadores de Coahuila, ¿en riesgo por la Inteligencia Artificial y automatización de procesos?

Según una investigación elaborada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), dos de cada cinco trabajadores en México podrían estar en riesgo de perder sus empleos debido a la automatización de procesos y al avance de la Inteligencia Artificial (IA).

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En este contexto, Coahuila encabeza la lista de los estados con mayor riesgo de eliminación de puestos de trabajo, con un 28.1% de su población laboral. Esto se debe principalmente a la vocación industrial que caracteriza al estado.

Al respecto, el presidente de la Asociación de Industriales y Empresarios de Ramos Arizpe (AIERA), Sergio Alain Guerra, señaló que, aunque aún existe una fuerte demanda de mano de obra, que ha permitido a Coahuila mantenerse competitivo en comparación con otras regiones del mundo como Europa, Asia y Estados Unidos, donde la automatización ha avanzado de manera más acelerada, en el futuro existe un riesgo de reducción de empleos.

“En un futuro es un riesgo, pero, por ejemplo, las empresas que están llegando o que se instalarán en los próximos cinco años seguirán demandando mano de obra. Por eso seguimos siendo competitivos. Sabemos que vamos hacia un proceso de mayor automatización y menos trabajo manual, pero aquí aún falta tiempo”, explicó Guerra.

Además, destacó que uno de los retos principales para las empresas que se instalan en la región es la alta rotación de personal, lo que implica altos costos en capacitación y entrenamiento. Esto podría llevar a las empresas a preferir invertir en automatización en lugar de en mano de obra. Guerra explicó que esta tendencia podría ayudar a atender el déficit de personal que actualmente existe en la región.

“Depende de la perspectiva desde la que lo veas si es bueno o malo. Lo ideal sería generar más empleo, pero también, si inviertes en tecnología, eso traería otros avances a la región: más exigencia en infraestructura, más demanda para que las universidades preparen mejor a los egresados y un nivel más elevado de manufactura. Los puntos negativos, claro, son que este nivel de manufactura incrementa los costos y se pierde un poco de competitividad frente a otras regiones”, señaló.

El líder empresarial también resaltó que es un hecho que las nuevas tecnologías impactarán las industrias en el futuro, por lo que las universidades deben estar preparadas para formar a los futuros egresados con conocimientos en automatización e inteligencia artificial, a fin de que Coahuila pueda hacer frente a este fenómeno.

En contraste con las preocupaciones empresariales, representantes sindicales señalan que los trabajadores se están preparando para estos cambios. Jesús Berino Granados, secretario general adjunto de la CTM Coahuila, señaló que este fenómeno ya se ha venido anticipando desde hace algunos años y consideró que, aunque la modernización podría ayudar a mitigar el déficit de mano de obra en el estado, lo ideal sería seguir creando empleos.

“Quisiéramos que nuestra gente siga trabajando, pero también hay que recordar que hay que ser competitivos a nivel nacional y mundial, y las empresas tienen que irse adecuando para que su producto no se quede fuera del mercado”, explicó Berino.

Por su parte, Jorge Alberto Morales Núñez, secretario general de la CROC, reconoció que el impacto de la automatización ya se está sintiendo en las empresas con contrato colectivo.

En ese sentido, mencionó que la automatización podría reducir las plazas de trabajo hasta en un 5% inicialmente, debido a la alta rotación de personal en la región Sureste, lo que llevaría a las empresas a comenzar a implementar procesos automatizados para aumentar la productividad y mantener la competitividad.