¿Y los aplausos para el personal de Salud? En México no se les reconoce, pero sí se les agrede
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En esta semana se celebró el Día Internacional de la Enfermería, pero pasó desapercibido
Esta semana se celebró el Día Internacional de la Enfermería y prácticamente pasó desapercibido para la ciudadanía y hospitales, a pesar de que este gremio demostró su importancia dentro de la estructura del país frente a la lucha contra el COVID-19.
Este sector es uno de los principales afectados ante la contingencia y en Coahuila, del total de casos positivos, gran parte pertenece a este gremio (135).
“Lili” es enfermera veterana en uno de los hospitales COVID-19 de la ciudad, y otorgó su opinión de manera anónima sobre por qué cree que a diferencia de otros países, en México no es tan marcado dicho reconocimiento.
“En México es muy criticado el sector Salud por su ineficiente participación respecto a la atención, aunado al poco o escaso insumo. No contamos ni con hospitales ideales. Tampoco con personal eficiente. Somos muy pocos los que tratamos de hacer lo mejor que se puede. Y me cuento, porque el que tiene verdadera vocación y amor a esta profesión siempre iremos contra la corriente. Es por la falta de educación a este servicio que México reacciona violento contra el personal.
“Son muy pocos los que tratan de comprender y lo manifiestan con pequeños bocadillos o alimentos. No tengo palabras cómo expresar que aún en medio de tan absurdas agresiones, siempre hay alguien que te abraza el corazón con detalles así”, señaló la profesional.
Otro enfermero que otorgó su opinión fue Hugo Hernández, quien labora en urgencias respiratorias y en el filtro para COVID-19 en el Hospital Universitario. Él señala que México se quedó con la idea de mediocridad en la atención hospitalaria.
“Los aplausos al personal, en México, no creo que sean necesarios. Lo que se necesita es respeto hacia la labor que realizamos, porque en muchas de las ocasiones, antes de la pandemia no se reconocía o le daban poca importancia al trabajo diario.
“México se quedó con la idea de mediocridad en la atención, e inhumana. La carga de trabajo al personal se volvió una cantidad enorme, y por ende piensan y se quejan de una mala atención, créeme que se trata de dar la mejor calidad de atención posible aunque la carga de trabajo sea inmensa.
“Lo mejor que nos pueden dar es que se queden en casa y cumplan todas las medidas de prevención”, agregó.