Paco Palencia, en `romance' con los Pumas

El romance entre los Pumas y Francisco Palencia no es de esos que pierden pasión con el tiempo; al contrario, el amor que el atacante siente por el club crece cada día.

Eso explica la alegría que le provoca el trozo de tela elástica que prende de su bíceps izquierdo en cada partido. Ser designado capitán de los universitarios consolidó aún más la dulce historia que vive desde principios de 2007, cuando regresó de Estados Unidos, tras su paso con las Chivas USA.

"Para empezar, es un orgullo", presume el experimentado delantero. "Ponerme la camiseta de Pumas es una responsabilidad muy grande, representar a esta institución, [a la que] también [quiero] retribuirle que me dio la oportunidad de volver a México a un club del que me enamoré y estoy totalmente convencido de estos colores".

La afinidad que hoy valora no se generó de forma casual; tampoco parece haber llegado a su límite. El Niño agradece las innumerables muestras de cariño recibidas desde que está con los felinos, a los que -hasta ahora- ha ayudado a evadir el descenso y obtener dos campeonatos del futbol mexicano (Clausuras 2009 y 2011).

"Es una historia muy romántica lo que sucede aquí, así es que es un proceso", explica. "No es que haya caído aquí y dijera que me iba a enamorar de este equipo. Pasó y estoy muy contento de que fuera con un gran club".

Como en muchas relaciones amorosas, al veterano le es complicado dictaminar cuándo fue seducido. Considera que "no hay una [fecha] exacta, es un proceso: empezar a jugar, ver cómo la gente se entrega contigo, que siempre te apoya estés bien o mal, que también se dé cuenta de que das el 100% en cada partido y entrenamiento".

"Te vas envolviendo, cayendo en una comunión bien bonita con la afición y, sobre todo, con la institución, porque han pasado muchísimas cosas en este club: te apoyan cuando estás mal, para algún contrato, renovarte, te valoran, te hacen sentir como en casa, como una familia", añade.

"Doy todo lo que está de mi parte para el equipo, nos ayudamos entre todos, tanto la directiva con [Víctor] Mahbub y Mario Trejo, como el cuerpo técnico. Incluso, con el pasado, el de Tuca [Ferretti], también hubo una comunión bastante cordial".

La mejor prueba es que sus compañeros han recibido muy bien su nombramiento como capitán felino, pese a no estar formado en el club. Francisco les corresponde dentro y fuera de la cancha. En el discurso, resalta el liderazgo de otras piezas clave para Guillermo Vázquez.

"Con todo esto que pasó del 2007 para acá, tener el gafete es una responsabilidad muy grande, pero aunque sólo yo lo porto, hay muchos capitanes en el equipo", detalla. "De cara al público tiene que haber uno, pero existen bastantes aquí y ayudan mucho. Merecen todos mis respetos [Darío] Verón, el Chispa [Velarde], Marco [Palacios]...".

Quienes también contribuyen en esta historia de amor.