Dos históricos en busca de volver a una Semifinal: Benfica e Inter de Milán
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Los Cuartos de Final de la Champions League, reunirán a João Mario con en el equipo en el que vivió “la peor etapa de su carrera” y con el que tiene cuentas pendientes
ROMA.- Benfica e Inter de Milán, dos históricos del fútbol europeo, ganadores ya de la máxima competición, buscarán volver a las Semifinales de la máxima competición continental iniciando con una ida de cuartos, en terreno portugués, donde los locales no podrán contar con el argentino Nico Otamendi.
Se trata de dos clubes ‘campeones’: dos para el Benfica cuando la competición se denominaba Copa de Europa; tres para el Inter, una de ella ya Liga de Campeones. También dos conjuntos que buscan recuperar un brillo perdido desde hace años.
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El Benfica se prepara con confianza para recibir de nuevo a un adversario italiano en la Liga de Campeones, tras el Juventus Turín. Sus actuaciones ante los turineses y las dificultades que tuvo el conjunto interista para superar al Oporto en octavos, le hacen creer en el triunfo, y en Portugal se les ve incluso como el gran favorito.
Lo afrontará el Benfica con una importante baja en defensa: la de su general Otamendi, por acumulación de tarjetas. Su sustituto, con mucha probabilidad, será el brasileño Felipe Rodrigues da Silva. conocido como ‘Morato’ ya que así se llama el sitio donde nació.
La trayectoria europea de las “águilas” esta temporada ha sido envidiable, con un primer puesto en el mismo grupo que el París Saint-Germain y el Juventus y un balance de seis victorias, dos empates y ninguna derrota.
Sin embargo, el duelo contra los “nerazzurri” llega tras unas semanas deslucidas para el Benfica, que viene de una derrota en casa contra el Oporto, sólo la segunda que sufre en la Liga.
Tanto en el clásico como en el choque anterior, el triunfo contra el Rio Ave (0-1), la contundencia ofensiva que ha caracterizado su trayectoria estuvo ausente, algo que intentará subsanar el martes.
Su principal baza para el partido de ida de cuartos será un nombre conocido en tierras milanesas, João Mario.
A sus 30 años, Mario está disfrutando del mejor año de su carrera, y es imprescindible en el Benfica, donde contribuye a la construcción del ataque e incluso a los goles, con 23 tantos y 11 asistencias.
Tiene cuentas pendientes con el Inter, donde vivió “la peor etapa de su carrera”, según contó al diario luso A Bola en 2020.
El tercer fichaje más caro de siempre de los “nerazzurri” jugó poco en un Inter entonces inestable, encadenó varios periodos de cesión e incluso estuvo apartado.
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“Estaba en una situación extremadamente negativa en Italia (...). Me confundía cómo un club puede pagar 40 millones por un jugador y tratarlo como si fuera un chaval del filial o de la cantera”, afirmó entonces.
Mario estará seguro en el once del técnico alemán Roger Schmidt, que para el partido tiene dudas respecto a sus laterales.
El danés Bah se lesionó en el clásico y deberá ser reemplazado por el brasileño Gilberto, mientras que la presencia del español Grimaldo aún no está asegurada.
REGRESA EL INTER
El Inter de Milán regresa a los cuartos de final de la Liga de Campeones tras doce años alejado de las grandes citas en la máxima competición continental, aunque lo hace rodeado de un mar de dudas después de los últimos resultados cosechados en fronteras italianas.
Son cinco partidos seguidos los que el Inter acumula sin conocer la victoria y que le han dejado fuera de los puestos de Liga de Campeones en Serie A, haciendo saltar todas alarmas en la afición interista.
Su última victoria data de hace poco más de un mes, un 5 de marzo que dio el pistoletazo de salida a más de 30 días de desazón en los que el único motivo de alegría fue el empate a cero ante el Oporto que certificó la clasificación a cuartos.
El choque de ida ante el conjunto luso se presenta en Milán como la oportunidad perfecta para reconducir el camino y tornar la dinámica en positiva en esta recta final.
También es una oportunidad de oro para el italiano Simone Inzaghi, otra vez cuestionado por la mala racha de un equipo que ha demostrado ser incapaz de mantenerse motivado y regular ante desafíos no tan ilusionantes, pero que en las grandes noches ha exhibido el oficio y aguante necesario para mantenerse a flote.
Encara el conjunto ‘nerazzurri’ el partido más importante en lo que va de temporada, además de cargando el peso que conllevan los malos resultados, con la baja de uno de los que ha sido sus ejes en el centro del campo, un Hakim Calhanoglu que se convirtió en el termómetro interista tras la lesión del croata Marcelo Brozovic pero que volvió lesionado de su concentración con Turquía en el pasado parón de selecciones. Una baja que se suma a la del central eslovaco Milan Skriniar.
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Con Brozovic asumiendo de nuevo el rol que dominó la temporada pasada, la gran duda del once de Inzaghi reside, una vez más, en la ofensiva. Siendo indiscutible el argentino Lautaro Martínez, parece que el técnico apostará por el belga Romelu Lukaku, que llega de marcar ante el Juventus y de ser titular en los últimos partidos, algo que parece premeditado para que coja rodaje precisamente para este duelo, dejando al bosnio Edin Dzeko en el banquillo como posible recurso en la segunda mitad.
El argentino Joaquín el ‘Tucu’ Correa está ya completamente recuperado de la lesión que le apartó de los octavos y puede ser otro recurso en ataque para Inzaghi.
La ilusión de estar de vuelta en el centro de los focos parece ser suficiente gasolina en Liga de Campeones para un Inter que priorizará la efectividad a la brillantez para que el Giuseppe Meazza (San Siro) sea el escenario en el que se dicte sentencia.
