Tamirat Tola rompe la supremacía keniana y gana el maratón olímpico en París 2024
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La carrera fue marcada por un recorrido icónico por las calles y sitios históricos de París, mientras que el favorito Eliud Kipchoge no pudo completar la prueba
En una histórica y sorpresiva victoria, el etíope Tamirat Tola se coronó campeón del maratón masculino en los Juegos Olímpicos de París, poniendo fin a la racha de dominio keniano en esta prueba. Con un tiempo récord de 2 horas, 6 minutos y 26 segundos, Tola estableció un nuevo estándar olímpico en la icónica ciudad de la luz.
El podio fue completado por el belga Bashir Abdi, quien cruzó la meta 21 segundos después de Tola, seguido por el keniano Benson Kipruto, que llegó 34 segundos más tarde. La victoria de Tola marca un hito significativo, ya que es el primer corredor no keniano en ganar el oro olímpico desde el ugandés Stephen Kiprotich en Londres 2012.
A sus 32 años, Tola sorprendió al mundo del atletismo al inscribirse en la competencia de última hora, sustituyendo a su compatriota Sisay Lemma, quien sufrió una lesión poco antes de los Juegos. Esta medalla dorada se suma a la de bronce que obtuvo en los 10,000 metros en los Juegos de Río 2016, consolidando su transición exitosa de la pista al maratón.
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Durante los últimos metros de la carrera, Tola se dio el lujo de voltear a mirar a sus perseguidores, confiado en su amplia ventaja, y disfrutó de los aplausos del público parisino. “Me ha ido muy bien en el maratón tras dejar la pista”, declaró el atleta, quien en noviembre pasado rompió un récord de 12 años al ganar el maratón de Nueva York.
El belga Bashir Abdi, de 35 años y nacido en Somalia, también sumó su segunda medalla olímpica, tras obtener el bronce en Tokio 2021. Por su parte, el keniano Eliud Kipchoge, dos veces campeón olímpico, no pudo completar la carrera tras quedar descolgado a los 30 kilómetros, en lo que fue un día complicado para la leyenda del maratón.
La carrera comenzó en el Hôtel de Ville y llevó a los corredores por un recorrido pintoresco que incluyó parques, bosques y un ascenso de 436 metros. Los atletas también pasaron por lugares icónicos como la Opéra Garnier y el Museo del Louvre, llegando incluso al punto medio cerca del Palacio de Versalles, un escenario digno de la realeza.
Con información de AP
