Amnesia infantil... esta es la razón por la que no tienes recuerdos de cuando eras bebé

Los bebés y los niños pequeños son verdaderas esponjas de conocimiento, absorbiendo información constantemente del mundo que los rodea. Sin embargo, cuando llegamos a la adultez, la mayoría de nosotros no podemos recordar eventos específicos de nuestros primeros años de vida. Este fenómeno es conocido como “amnesia infantil” y ha desconcertado a los científicos durante décadas.

Un estudio reciente ha revelado que los recuerdos de los bebés pueden permanecer almacenados en los rincones más profundos de la mente, aunque los adultos no sean capaces de acceder a ellos.

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EL CEREBRO INFANTIL Y SU MANERA DE ALMACENAR RECUERDOS

Los investigadores han descubierto que, aunque los bebés forman recuerdos de eventos específicos, estos pueden no ser accesibles a medida que crecen. Esto se debe a la forma en que funciona su memoria en comparación con la de los niños mayores y adultos.

Existen dos tipos principales de aprendizaje y memoria:

• Aprendizaje estadístico: Permite extraer patrones del entorno y es esencial para el desarrollo del lenguaje, la visión y los conceptos generales.

• Memoria episódica: Se enfoca en recordar eventos específicos con detalles concretos.

Los recién nacidos dependen en gran medida del aprendizaje estadístico, lo que explica por qué son menos propensos a almacenar recuerdos detallados accesibles en la adultez.

EXPERIMENTOS QUE REVELAN EL MISTERIO

Para analizar cómo almacenan recuerdos los bebés, los científicos realizaron un experimento con 26 bebés de entre 4 meses y 2 años:

• Se les mostraron imágenes de caras, objetos y escenas.

• Luego se les presentó una imagen que ya habían visto junto a una nueva.

• Si los bebés miraban más tiempo la imagen conocida, significaba que la recordaban.

Los resultados mostraron que, aunque los bebés reconocían imágenes vistas anteriormente, estos recuerdos parecían desvanecerse con el tiempo.

EL PAPEL DEL HIPOCAMPO EN LA MEMORIA INFANTIL

El hipocampo es la región del cerebro responsable del almacenamiento de los recuerdos a largo plazo. Durante el experimento, los investigadores observaron que cuanto mayor era la actividad en el hipocampo al ver una imagen, más probable era que los bebés la reconocieran después.

Curiosamente, esta actividad ocurría en la misma zona del hipocampo asociada con la memoria episódica en adultos, lo que sugiere que los bebés realmente guardan recuerdos específicos, aunque no puedan acceder a ellos después.

¿LOS RECUERDOS INFANTILES SIGUEN AHÍ?

Los investigadores han planteado dos posibles explicaciones para la amnesia infantil:

• Los recuerdos simplemente desaparecen: Los recuerdos episodios formados en la infancia no se convierten en almacenamiento a largo plazo y se pierden con el tiempo.

• Los recuerdos siguen presentes pero inaccesibles: Los recuerdos están almacenados en el cerebro, pero la maduración del hipocampo impide su recuperación.

• Nick Turk-Browne, investigador principal del estudio, sospecha que la segunda teoría es correcta. Actualmente, está explorando si niños pueden recordar videos caseros filmados desde su perspectiva cuando eran bebés.

DATOS CURIOSOS SOBRE LA AMNESIA INFANTIL

• La mayoría de los adultos no recuerdan nada antes de los 3 a 4 años de edad.

• Algunos estudios sugieren que las memorias infantiles pueden ser fragmentadas y almacenadas en el inconsciente.

• Experimentos con hipnosis han intentado recuperar recuerdos de la infancia con resultados mixtos.

• Los niños pequeños tienen una mejor memoria implícita, lo que significa que pueden recordar habilidades y patrones sin recordarlos conscientemente.

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¿ES POSIBLE RECUPERAR LOS RECUERDOS DE LA INFANCIA?

Aunque por ahora los recuerdos de la infancia parecen inalcanzables, la investigación sobre la memoria infantil continúa. En el futuro, podrían desarrollarse métodos que permitan acceder a estos recuerdos ocultos.

Mientras tanto, la amnesia infantil sigue siendo un fenómeno intrigante que nos recuerda cuán complejo y fascinante es el funcionamiento del cerebro humano.