El significado del Sábado de Gloria: día en que se ‘aparece el diablo’, queman a Judas y la gente se moja

La Semana Santa, conocida como Semana Mayor, es un periodo de ocho días que abarca del Domingo de Ramos hasta Domingo de Resurrección; sin embargo, los días más importantes son el Triduo Pascual, es decir, el conjunto de tres días en los que tuvieron lugar la pasión, muerte y la resurrección de Jesucristo.

Estos días son el Jueves Santo, Viernes Santo, Sábado Santo y Domingo de Resurrección o Domingo de Pascua; en 2025 estos corresponde al 17, 18, 19 y 20 de abril respectivamente.

TE PUEDE INTERESAR: ¿Qué se conmemora el Viernes Santo, día clave de la Semana Santa, y por qué no te debes bañar?

SÁBADO SANTO O SÁBADO DE GLORIA

El Sábado Santo es el día que media entre la muerte y la resurrección de Jesús, tras un día de duelo y dolor por la crucifixión de Cristo en el Calvario, con el fin de salvar al hombre del pecado y otorgarle la vida eterna, previo al Domingo de Pascua.

Se lleva a cabo una vigilia pascual, en la cual se acostumbra bendecir el agua y encender las velas en señal de la resurrección de Jesús, que acontece la madrugada del domingo.

Se trata del penúltimo día de la semana al evocar la crucifixión y muerte de Jesús, así como que a lo largo del día se evoca el dolor de la Virgen María al ver morir a su hijo en la cruz.

De acuerdo con las escrituras en la Biblia, el hijo de Dios resucitará, por lo que María mantiene la esperanza de verlo, así como los fieles esperan este acto de Fe.

“Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente”: Juan 11, 25-26.

El Sábado de Gloria es sinónimo de mantener el duelo por la muerte de Cristo, cancelando todas las actividades litúrgicas, la Eucaristía, así como sacramentos y mantenerse en silencio, cabe destacar que en los templos, desde días antes, cubre sus figuras de Santos para ser descubiertos durante la Vigilia Pascual y la resurrección de Jesús.

Durante este día, el cuerpo de Jesús permaneció en el sepulcro esperando al Domingo de Resurrección.

CREENCIAS DEL SÁBADO DE GLORIA

Debido a esta baja protección, por la muerte de Jesús y el duelo que vive la Iglesia Católica, existe la creencia de que ‘el diablo suele aparecerse’ en la Tierra con el fin de tentar a la población por medio del pecado.

Además, poblaciones creen que ‘el diablo anda suelto’ provocando accidentes, tragedias y muertes.

Una de las tradiciones es la ‘Quema de Judas’ que consiste en rechazo al apóstol que lo traicionó, Judas Iscariote; aunque también es una crítica social y política, porque no sólo se hace con intenciones católicas, también por aquellas intenciones que afectan a la sociedad e involucran al Gobierno.

La representación busca rechazar la traición y corrupción, personificadas en Judas Iscariote, el apóstol que, según el Nuevo Testamento de la Biblia, entregó a Jesús de Nazaret a cambio de 30 monedas de oro.

Aunque actualmente busca incluir elementos de crítica social, ya que, en lugar de Judas, se ‘queman’ personajes públicos controvertidos, como políticos, figuras de la farándula o incluso conceptos abstractos como la corrupción o la violencia.

Por lo que la ‘Quema de Judas’ no sólo es un acto de purificación espiritual, también es un acto de purificación espiritual.

TE PUEDE INTERESAR: Jueves Santo: ¿Qué se conmemora y por qué se visitan siete iglesias?

Mientras tanto, personas también suelen mojarse al lanzarse cubetas con vital líquido o ir a piscinas y playas como símbolo de pureza; luego que el día anterior no pudieron hacerlo, como bañarse, debido a que ‘no hay quien bendiga’ el agua.

Pero, actualmente, la costumbre de arrojarse cubetas de agua no está permitido por la crisis hídrica que se vive en diversos estados de México.

¿POR QUÉ NO DEBES DESPERDICIAR AGUA?

En el contexto de crisis hídrica, sequías severas y multas económicas, la tradición de arrojarse agua el Sábado de Gloria se ha convertido en un problema.

La Iglesia Católica, de acuerdo con el medio Desde la Fe, señala que hoy no se debe tirar ni desperdiciar agua, ya que “las cosas han cambiado” al destacar la conciencia de nuestra responsabilidad de cuidar el agua.

Además, agrega que “el Sábado de Gloria no es de alegría aún, es Sábado Santo y es de gran luto porque Jesús está en la tumba”.

De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), durante 2024 la crisis hídrica en el país fue severa, pese a los meses con lluvias torrenciales, la sequía persistió en amplias zonas del país. Numerosas presas y embalses alcanzaron cifras mínimas en sus niveles de almacenamiento.

Estados como la Ciudad de México cuentan con sanciones por el desperdicio de agua, de acuerdo con la Fracción VIII, del Artículo 29 de la Ley de Cultura Cívica de la Ciudad de México, estipula que son: “infracciones contra el entorno urbano de la Ciudad: desperdiciar el agua o impedir su uso a quienes deban tener acceso a ella en tuberías, tanques o tinacos almacenadores, así como utilizar indebidamente los hidrantes públicos, obstruirlos o impedir su uso”, por lo que, quien sea sorprendido rompiendo la ley se le impondrá un arresto de 20 a 36 horas o de 10 a 18 horas de trabajo en favor de la comunidad.

Además, lo establecido por la Ley de Derecho al Acceso, Disposición y Saneamiento del Agua, el artículo 11 dispone que autoridades aplicarán una multa económica a quienes se les detecte despilfarrando agua, oscilando entre 11 mil 314 y 33 mil 942 pesos mexicanos.

TE PUEDE INTERESAR: Viernes Santo: ¿Por qué no se celebra misa y cuál es su importancia en Semana Santa?

IMPORTANCIA DE LA SEMANA SANTA

La Semana Santa representa el final de la Cuaresma, un periodo de preparación que dura cuarenta días, en que se recuerda el tiempo que pasó Jesucristo en el desierto hasta su entrada en Jerusalén. Dicha llegada se celebra el Domingo de Ramos.

La Semana Santa es un tiempo para dedicarse a la oración y la reflexión, acerca de cómo Jesucristo decide tomar el lugar de los hombres y recibir el castigo para liberar a la humanidad del pecado.

Además, la Semana Santa es el tiempo ideal para que el ser humano medite sobre sus acciones y los cambios que debe realizar para acercarse más a Dios y cumplir con sus mandamientos.