Ausencia de AMLO no fue bien manejada ni por la prensa ni por funcionarios: Zepeda Patterson
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En su análisis sobre los acontecimientos posteriores al desmayo del Presidente, el columnista cuestiona el trabajo tanto de periodistas como el de Jesús Ramírez y Adán Augusto López
El periodista Jorge Zepeda Patterson considera que los rumores alarmistas divulgados por la prensa sobre la salud de Andrés Manuel López Obrador no fue mejor que el manejo de información por parte de los funcionarios de gabinete presidencial.
En su análisis sobre lo acontecido tras el incidente en Yucatán, el pasado domingo, donde López Obrador sufrió un desmayo, advierte que fue una tercera edición de lo ya experimentado en las dos anteriores ocasiones en que el Presidente se ha contagiado de COVID-19.
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“La repetición del mismo numerito es un fiel reflejo del periodismo partisano y de la polarización política que experimentamos. Del lado de la oficina del Presidente, un afán obvio de minimizar la afección, algo que tampoco debe extrañarnos”, refiere.
El ejecutivo federal sufrió hace una semana un desmayo −que calificó como un “váguido”, como consecuencia del virus del COVID− cuando se encontraba en una gira de trabajo en la sureste del país.
Ese hecho desató una serie de especulaciones sobre el estado de salud del Presidente luego de que el Diario de Yucatán afirmó que López Obrador se había desmayado y había sido trasladado de manera urgente a la Ciudad de México, contra la información oficial divulgada por el vocero presidencial, quien se encontraba en Tamaulipas.
Jesús Ramírez Cuevas afirmó que el mandatario se encontraba bien y continuaba su gira por el sureste del país.
“Explicable que la primera reacción de Jesús Ramírez, vocero presidencial, quien se encontraba en Tamaulipas, haya sido la de considerar que todo el asunto no era más que un rumor; pero tendría que haber corregido minutos más tarde”, señala Zepeda Patterson.
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El periodista además cuestiona el manejo hecho sobre la situación del secretario de Gobernador, Adán Augusto López, quien, incluso después de que el propio López Obrador confirmó su desvanecimiento, seguía criticando al Diario de Yucatán por difundir el episodio sufrido por el mandatario.
Al respecto, el también analista político advierte que negar el desmayo de AMLO durante una reunión entre colaboradores no tenía sentido porque “una cosa es el control de daño y otra el ocultamiento grosero”.
Zepeda Patterson también cuestiona la falta de profesionalismo de la prensa que se dedicó a especular sobre la situación de salud del Presidente. Sobre este tema, coincide con la opinión del también columnista Juan Pablo Becerra Acosta: “como si la tarea de los periodistas fuese publicar especulaciones y mentiras en lugar de reportear”.
“Y cuando el video del Presidente desmintió todas estas afirmaciones, lejos de publicar una disculpa, (los periodistas) argumentaron indignados que los rumores se desatan por la falta de información”, añade Patterson.
Durante su reaparición, la tarde del miércoles a través de un video compartido a través de sus redes sociales, el Presidente lució en buen estado de salud tras permanecer ausente desde la tarde del domingo.
El Presidente no sólo envió un mensaje a sus simpatizantes, a quienes dijo que se encontraba bien y recuperándose, sino también a sus “adversarios” que “tienen mucha imaginación”.
“Como presidente de México tengo la responsabilidad de informarles sobre mi estado de salud, ya lo hice, pero de todas maneras como han habido especulaciones, es importante decirles que estoy bien. Tengo COVID, se me complicó porque me fui a una gira muy intensa que inicié en Veracruz”, refirió.
El viernes pasado López Obrador encabezó de nuevo las conferencias de prensa mañaneras, las cuales en su ausencia había sido presididas por el secretario de Gobernación.