Deja ataque suicida del EI 40 muertos en Afganistán

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El grupo yihadista ha multiplicado sus ataques en Afganistán desde la retirada final de las tropas de Estados Unidos.
KABUL, AFG.- El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó ayer la autoría del atentado contra la minoría chií durante las oraciones del viernes en una mezquita en la ciudad de Kandahar, en el sur de Afganistán, que causó al menos 40 muertos.
“Decenas de muertos y heridos de los renegados politeistas en una operación doble de martirio que tuvo como objetivo un templo suyo en Kandahar”, afirmó el EI en un comunicado, en el que mostró una imagen de los dos atacantes.
“Dos caballeros del martirio (...) se lanzaron hacia los mayores templos de los renegados politeístas en la ciudad de Kandahar, en el sur de Afganistán, y en cuanto llegaron uno de ellos disparó contra los guardias”, apuntaron.
El Estado Islámico agregó que el “primer mártir hizo detonar su chaleco explosivo contra una aglomeración de politeístas en el vestíbulo del templo, mientras que el segundo detonó su chaleco explosivo en el medio del templo”.
“Las dos explosiones causaron la caída de decenas de renegados entre muertos y heridos, así como gran destrucción en el templo”, concluyó la nota.
El atentado tuvo lugar ayer en la mezquita Imam-Bargah, el mayor templo de la minoría chií en Kandahar, donde cientos de fieles se congregaban por las oraciones del viernes, y causó al menos 40 muertos y 75 heridos, informaron fuentes oficiales.
Los talibanes lanzaron hace unas semanas una operación especial contra el EI en varias provincias del país, sobre todo en Kabul y en su bastión en la región oriental de Nangarhar, para acabar con el que se ha convertido en la principal amenaza del nuevo Gobierno islamista.
El grupo yihadista ha multiplicado sus ataques en Afganistán desde la retirada final de las tropas de Estados Unidos de Afganistán poco antes de la medianoche del pasado 31 de agosto, aunque el mayor de ellos ocurrió el pasado 26 de agosto contra el aeropuerto de Kabul, que causó unos 170 muertos.