Feminicidio de Frida Santamaría en Michoacán: pese a inconsistencias, reclasifican a homicidio
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La familia de la joven asegura que el caso nunca fue revisado bajo perspectiva de género.
El pasado 18 de junio de 2022, Frida Santamaría fue víctima de feminicidio en Sahuayo, Michoacán, mientras se encontraba en una fiesta con su entonces pareja, Juan Pablo “N”, ahora señalado por el asesinato de la joven.
Sin embargo, desde que comenzó a llevarse a cabo el caso, la familia de la víctima ha encontrado diversas inconsistencias. En una entrevista con Milenio, aseguran que nunca se inició una investigación con perspectiva de género.
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“En el momento que una mujer muere y que se dice que fue su novio, en ese momento debe iniciar una investigación con perspectiva de género, y la fiscalía de Jiquilpan no inició una investigación con perspectiva de género, se fue por lo más sencillo, un homicidio”, lamentó Samantha García, prima de Frida.
Y, aunque el 26 de septiembre del mismo año, se le procesó al señalado por delito de feminicidio, la apelación de su defensa logró que se reclasificara a homicidio culposo, culminando en una pena mínima de tres años, y hasta podría llevar su procesamiento en completa libertad.
Fue durante una audiencia cuando Juan Pablo “N” confesó haber cometido el asesinato, clasificándolo como un “accidente”. Empero, esto alarmó a la familia de Frida, quienes notaron una serie de incongruencias en las declaraciones del detenido, quien dijo no conocer a Frida ni saber del arma responsable.
“El juez decide tomar como única verdad absoluta, lo que el acusado dice, lo que él confiesa en ese momento, dado que ya había dado dos declaraciones y las estaba cambiando, tiene muchas contradicciones, desmiente a sus testigos iniciales”, apuntó García.
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Ahora, la familia de Frida insiste que todo se trata de una cooperación entre la Fiscalía de Michoacán y el presunto feminicida, pues es hijo de un expresidente municipal de Sahuayo, donde suscitaron los hechos, además, aseguran que la misma dependencia los habría amenazado.
“Es imposible no estar con miedo porque, pues son personas que no están tranquilas ni conformes con lo que ha pasado y ha sido muy complicado, esa parte es demasiada inseguridad para todos”, reconoció Patricia García, mamá de Frida.
Con ello, la familia de la víctima seguirá apelando para que el asesinato vuelva a clasificarse como feminicidio y que se juzgue bajo perspectiva de género.