Bukele exige a los pandilleros que dejen de matar en El Salvador
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Nayib Bukele, presidente de El Salvador, exigió a los pandilleros que “paren de matar ya” y les advirtió que si la ola de asesinatos no cesa, sus compañeros que están actualmente presos “la van a pagar también”.
“Tenemos 16,000 ‘homeboys’ (pandilleros) en nuestro poder. Aparte de los 1,000 arrestados en estos días. Les decomisamos todo, hasta las colchonetas para dormir, les racionamos la comida y ahora ya no verán el sol. Paren de matar ya o ellos la van a pagar también”, publicó Bukele en su cuenta de Twitter.
En El Salvador las pandillas cuentan con alrededor de 70,000 miembros, de los cuales 16,000 están encarcelados.
Actualmente El Salvador está bajo un régimen de excepción, que fue decretado la madrugada del domingo por el Congreso a petición de Bukele, con lo que quedan suspendidas algunas garantías constitucionales.
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Los derechos que fueron suspendidos son la libertad de asociación y reunión, el derecho a la defensa, la prohibición de la intervención de las telecomunicaciones, y también se amplió el plazo de la detención administrativa a 15 días, cuando normalmente es de 3 días.
Aún con estas medidas extraordinaria y a las detenciones masivas, las pandillas desafiaron al Gobierno de Bukele.
Por otra parte, el país registró el viernes pasado 14 homicidios, 11 el domingo y 62 el sábado, siendo este último día el más mortífero en la historia reciente de El Salvador.
En este sentido, las autoridades achacan a las pandillas, sobre todo a la Mara Salvatrucha (MS13), la ola de violencia que se vive en el país centroamericano, sin embargo, aún no se explican la razón de esta ola de violencia.
Esta no es la primera vez que un Gobierno salvadoreño combate a las pandillas con detenciones masivas. Tanto expresidentes Francisco Flores (1999-2004) como Elías Antonio Saca (2004-2009) en el pasado lo hicieron, con sus planes Mano Dura y Súper Mano Dura respectivamente.
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Aún así los índices de homicidios se mantuvieron en aumento hasta 2015, convirtiendo a El Salvador en el país más violento del mundo con 103 asesinatos por cada 100,000 habitantes.
Después de ese año, las cifras de asesinatos comenzaron a disminuir paulatinamente, acentuándose la caída desde 2019, cuando Bukele llegó a la Presidencia.
Por otra parte, Nayib Bukele, acusó tanto a la OEA como a la CIDH de auspiciar en el pasado una “tregua” que “fortaleció” a las pandillas.
“Ustedes en la OEA y la CIDH fueron los que patrocinaron la ‘Tregua’ que solo fortaleció a las pandillas y les permitió acumular recursos, dinero, armamento y les permitió entrenarse en los polígonos de tiro del ejército para matar salvadoreños. Llévense su peste de nuestro país”, escribió el presidente salvadoreño en Twitter.
Esta acusación es en respuesta a Paulo Abrao, exsecretario ejecutivo de la CIDH, quien censuró un tuit de Bukele en el que advierte a la pandillas que si no frenan la ola de asesinatos sus colegas presos “van a pagar también”.
“Populismo penal: Ilegalidades para enfrentar ilegalidades. Barbaries para enfrentar barbaries. Resultado Final: + ciclo de violencia para todos”, escribió Abrao en su cuenta de Twitter.
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En 2012 la OEA apoyó un armisticio de las principales pandillas, Mara Salvatrucha (MS13) y Barrio 18, que fue impulsado por el Gobierno de Mauricio Funes.
José Miguel Insulza que en aquel entonces era el secretario general de la Organización de los Estados Americanos, expresó en esa época que realizarían un papel de “verificar el proceso”, entre otras tareas “que configuran el rol de garante (...) que nosotros asumiremos con mucho gusto”.
Em el tiempo que duró la vigencia de la tregua entre estas bandas los asesinatos tuvieron una caída en el país en un promedio de 14 diarios a 5, sin embargo, la ruptura de esta tregua llevó a El Salvador a convertirse en el más violento del mundo en 2015.
Con información de la Agencia EFE.
