Canadá legalizará consumo de marihuana en 2018
El Parlamento estudia la posibilidad de aprobar en julio del próximo año la ley C-45 propuesta por el primer ministro Justin Trudeau, que permitirá el uso recreativo del cannabis
Toronto.- Canadá se prepara para hacer realidad una de las más controvertidas promesas electorales del primer ministro, Justin Trudeau, y legalizar en julio de 2018 el consumo recreativo de mariguana, lo que convertirá a Canadá en el mayor país industrializado donde el cannabis es totalmente legal.
El proyecto de ley que legalizará el consumo recreativo de mariguana sigue su curso en el Parlamento canadiense, con el objetivo de que en julio de 2018 la legislación haya sido aprobada y esté en marcha.
La Cámara de los Comunes canadiense está estudiando la propuesta del gobierno de Trudeau y se espera que los diputados aprueben el proyecto de ley C-45, como es conocido, sin mayores problemas, ya que el Partido Liberal del primer ministro tiene una mayoría de diputados.
Pero los planes de Trudeau podrían encontrar más problemas cuando el proyecto de ley llegue al Senado, a finales de año.
Varios senadores han expresado ya sus dudas de que la Cámara Alta sienta la misma obligación que la mayoría de los diputados para que la legislación sea aprobada en julio de 2018, como quiere Trudeau.
El senador independiente André Pratte declaró la semana pasada que la fecha de julio de 2018 es un "límite político" que los senadores no están obligados a cumplir.
Paradójicamente, el posible bloqueo, o en el mejor de los casos, la ralentización, del proyecto de ley C-45 es fruto de otra promesa que Trudeau realizó durante la campaña electoral hace dos años: que los senadores liberales serían independientes de su partido.
Hasta que Trudeau llegó al poder a finales de 2015, los senadores estaban sometidos a la disciplina de partido, ya fuese el Partido Liberal o el Partido Conservador. Pero Trudeau liberó a los senadores liberales en aras de una democratización de la Cámara Alta.
En Canadá, los senadores no son elegidos por voto popular, sino que son designados, de por vida, por el primer ministro en el poder.
Así que, con su recién obtenida libertad de acción y voto, los senadores pueden bloquear la aprobación de una controvertida propuesta de ley sin que Trudeau, su Gobierno o el Partido Liberal puedan hacer demasiado para impedirlo.
De momento, senadores como Pratte no han indicado que bloquearán el proyecto de ley elaborado en la Cámara Baja, sino que se tomarán el tiempo que sea necesario para hacer las enmiendas que consideren imprescindibles.
"Lo que tenemos que tener en cuenta es que debemos hacer nuestro trabajo en serio, y eso es lo que vamos a hacer", explicó Pratte.