Donald Trump, actual inquilino de la Casa Blanca, no se compromete con una transición pacífica si pierde
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Donald Trump, presidente de Estados Unidos, no está dispuesto a dejar la Casa Blanca en una transición pacífica si llegara a perder las elecciones. Trump dijo sin tener evidencias que las votaciones masivas por correo llevarían a un fraude enorme, así mismo expresó que el resultado de las elecciones de noviembre acabará en el Tribunal Supremo.
El presidente estadounidense Donald Trump declinó comprometerse a una transferencia pacífica del poder si pierde la elección del 3 de noviembre.
“Veremos qué pasa”, dijo Trump en una conferencia de prensa, en respuesta a una pregunta sobre si se comprometía a una transferencia pacífica del poder. “Saben que me he estado quejando muy fuertemente sobre las boletas, y las boletas son un desastre”.
Trump mantine una campaña contra la votación por correo, tuiteando y hablando críticamente sobre el sistema. Más estados están alentando la votación por correo para mantener a salvo a las personas en medio de la pandemia.
El presidente, quien vota por correo, trató de establecer una distinción entre los estados que envían automáticamente boletas a todos los votantes registrados y aquellos que, como Florida, las envían solamente a los votantes que las solicitan.
Trump dijo sin evidencia alguna que las votaciones masivas por correo llevarían a un fraude enorme. Los cinco estados que usualmente envían boletas a todos los votantes no han registrado fraude significativo.
Trump pareció insinuar que si los estados se “deshiciesen” del envío de boletas no solicitadas por correo no habría preocupaciones de fraude ni de transferencia pacífica del poder.
“Ustedes van a tener una muy pacífica, no va a haber una trasferencia, francamente”, dijo Trump. “Va a ver una continuación. Las boletas están fuera de control, ustedes los saben, ¿y saben quién lo sabe mejor que nadie? Los demócratas lo saben mejor que nadie”.
Trump también se negó en julio a comprometerse a aceptar los resultados, e hizo declaraciones similares antes de los comicios de 2016.
La campaña del candidato presidencial demócrata Joe Biden respondió el miércoles como lo hizo en julio: “El pueblo estadounidense decidirá esta elección. Y el gobierno de Estados Unidos es perfectamente capaz de sacar de la Casa Blanca a cualquier intruso”.
Es improbable que un caos en estados con votación universal por correo vaya a causar una tabulación imprecisa de los resultados, como insinúa Trump.
Los cinco estados que ya tienen ese tipo de votación han tenido tiempo para fortalecer sus sistemas, mientras que cuatro estados que lo van a adoptar, California, Nueva Jersey, Nevada y Vermont, no lo han hecho. Washington, la capital, también lo va a adoptar.
De esos nueve estados, solamente Nevada no tiene una inclinación clara. Tiene seis votos electorales en juego, y sería decisivo solamente si existe una cuenta muy pareja en la votación presidencial.
California, Nueva Jersey, Vermont y D.C. son abrumadoramente demócratas y casi seguramente serán ganados por Biden.
* El resultado de las elecciones acabará en el Supremo
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que cree que el resultado de las elecciones de noviembre acabará en el Tribunal Supremo estadounidense, y que por eso se está dando tanta prisa para cubrir la vacante que dejó en esa corte el fallecimiento de la jueza Ruth Bader Ginsburg.
"Creo que esto (las elecciones) acabará en el Tribunal Supremo, y creo que es muy importante que tengamos nueve jueces", dijo Trump a los periodistas durante una reunión con fiscales generales de varios estados del país en la Casa Blanca.
"Es mejor si (aprobamos a una nueva juez) antes de las elecciones, porque creo que este fraude que están preparando los demócratas, este fraude acabará frente al Tribunal Supremo de EU", añadió.
Trump ha insinuado repetidamente que podría no aceptar el resultado de las elecciones del próximo 3 de noviembre si no se le declara ganador, e insite en que quiere que el vencedor se sepa la misma noche de los comicios, algo improbable debido al gran volumen de votos por correo que se esperan a raíz de la pandemia.
Trump planea nominar este sábado a su candidata para sustituir a Ginsburg, fallecida el pasado viernes a los 87 años, y este miércoles confirmó que la jueza cubano-estadounidense Bárbara Lagoa está entre las cinco magistradas que está considerando para el puesto, aunque negó que tenga planes de reunirse con ella.
La decisión de Trump de nominar de inmediato a una sustituta de Ginsburg generó polémica, porque la veterana jueza progresista dejó escrito, antes de morir, que su "deseo más ferviente" era "no ser reemplazada hasta que haya un nuevo presidente", tras los comicios.
Sin embargo, los republicanos han dejado claro que ya tienen los votos para confirmar a la nominada de Trump en el Senado, y aunque quedan menos de seis semanas para las elecciones, el mandatario insistió en que su objetivo es haberlo resuelto para entonces.
Si el resultado de las elecciones estuviera en disputa y no se hubiera cubierto la vacante que ha dejado Ginsburg, el Supremo contaría aún así con una mayoría conservadora de cinco jueces, frente a los tres de inclinación progresista que quedan en la corte tras la muerte de la célebre magistrada.
* Con información de la Agencia EFE