El creciente control de las pandillas acorrala a la democracia de Haití
La mayoría de los habitantes en Puerto Príncipe afirma que el control de los grupos armados se acerca al 100 por ciento
PUERTO PRÍNCIPE, HTI.- Líderes de pandillas han ido llenando el vacío de poder dejado por el Gobierno haitiano, mientras la población ve cómo su democracia se marchita y la violencia se sale de control.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) calculó en diciembre pasado que las pandillas tenían el control del 60 por ciento de la capital haitiana. Hoy en día, la mayoría de los habitantes afirma que el control de los grupos armados se acerca más al 100 por ciento.
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“Democráticamente hablando, hay poca o ninguna legitimidad”, según Jeremy McDermott, director de InSight Crime, un centro de investigación con sede en Washington D.C. especializado en la delincuencia organizada, consultada por The Associated Press. “Esto da a las pandillas más justificación para sus reclamos de ser los verdaderos representantes de las comunidades”.
El país caribeño ha sufrido mucho y por mucho tiempo ha sido el país más pobre del hemisferio occidental. Devastadores terremotos, huracanes y brotes de cólera han sido parte del contexto.
Además, se ha ido agudizando la crisis política tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse en 2021. El actual primer ministro, Ariel Henry, emergió como líder del país tras una lucha por el poder.
Las casi 200 pandillas de Haití se aprovechan del caos para aumentar su control sobre la población. La situación ha afectado especialmente a las mujeres, que acusan violaciones brutales en las zonas controladas por las pandillas.
Los secuestros y asesinatos también han ido aumentando. La ONU calcula que, en promedio, cuatro personas son privadas de su libertad cada día en Haití. Los asesinatos sumaron 2 mil 200 el año pasado, el doble que en 2021, según los datos de la ONU.
Tan sólo en lo que va del primer mes del 2023, 14 policías han sido asesinados. Situación que detonó protestas en Puerto Príncipe, en las que los uniformados bloquearon carreteras y dispararon armas de fuego al aire mientras exigían mejores condiciones para los agentes.
“La violencia relacionada con las pandillas ha alcanzado niveles no vistos en años... afectando a casi todos los segmentos de la sociedad”, explicó recientemente la Representante Especial de la ONU para Haití, Helen La Lime.
Otra circunstancia que ha agravado la crisis política de Haití es que ha perdido su última institución elegida democráticamente: el Senado. El pasado 11 de enero expiró el cargo de los últimos diez senadores que fueron electos por el pueblo. Haití no ha celebrado elecciones legislativas desde octubre de 2019.