Fallo histórico: Declaran a Tesla responsable de accidente mortal; deberá pagar 329 mdd
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Jurado de Miami considera que la compañía es parcialmente responsable, luego que un vehículo manejado con su sistema Autopilot protagonizara incidente vial
MIAMI, EU.– Un jurado federal en Miami declaró a Tesla parcialmente responsable de un accidente mortal ocurrido en 2019 en Key Largo, Florida, en el que murió una joven de 22 años y su pareja resultó gravemente herida. La decisión representa un revés legal significativo para la compañía automotriz, que hasta ahora no había perdido un caso similar en tribunales federales de Estados Unidos.
El veredicto ordena a Tesla el pago de 329 millones de dólares en concepto de daños, de los cuales 200 millones corresponden a daños punitivos, una cifra que refleja la gravedad con la que el jurado valoró la conducta de la empresa. La mayor parte del monto fue otorgado a la familia de la víctima, Naibel Benavides León, y a su novio Dillon Angulo, quien sobrevivió con lesiones graves.
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El incidente ocurrió cuando ambos jóvenes se encontraban fuera de su camioneta SUV estacionada. Un Model S de Tesla, conducido por George McGee con el sistema Autopilot activado, los atropelló a más de 100 kilómetros por hora tras ignorar una señal de alto. Según los documentos judiciales, McGee desvió la vista del camino para revisar su teléfono, lo que impidió que tomara control del vehículo a tiempo.
Aunque Tesla argumentó que la responsabilidad recaía por completo en el conductor, el jurado determinó que McGee fue 67% responsable del accidente, mientras que Tesla tuvo una responsabilidad del 32% por no evitar la colisión con su tecnología de asistencia.
En el centro de la demanda se encontraba el argumento de que Tesla promovió de manera engañosa su sistema Autopilot, presentándolo como más capaz de lo que realmente es. Los demandantes sostuvieron que esta estrategia alentó a los conductores a confiar excesivamente en una tecnología que, legalmente, sigue siendo un asistente de conducción, no un sistema autónomo.
La jueza federal Beth Bloom permitió que el caso continuara bajo los cargos de defecto de diseño y falta de advertencia, después de desechar otras acusaciones. Esta decisión podría sentar precedente en futuros litigios relacionados con tecnologías de asistencia avanzada a la conducción (ADAS, por sus siglas en inglés).
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Durante el juicio, los abogados de las víctimas presentaron evidencia forense e interna de Tesla, que indicaba que McGee había desactivado rutinariamente las funciones de seguridad del Autopilot. El propio conductor admitió haber desarrollado una confianza excesiva en el sistema durante sus recorridos diarios. Los abogados también acusaron a Tesla de ocultar información clave y grabaciones previas al accidente, que fueron recuperadas posteriormente por expertos.
Este fallo representa la primera derrota legal en un tribunal federal para Tesla en un caso de muerte por uso del Autopilot, y podría abrir la puerta a más demandas en estados como California y Texas, donde avanzan procesos similares.
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— Divergent (@Aneel2941985) August 3, 2025
La sentencia llega en un contexto de creciente escrutinio regulatorio sobre Tesla, que enfrenta investigaciones por parte del Departamento de Justicia y la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés), debido a la forma en que promociona sus sistemas Autopilot y Full Self-Driving.
Expertos legales advierten que el veredicto podría cambiar la manera en que los tribunales evalúan la responsabilidad en accidentes con vehículos parcialmente autónomos, al ampliar el enfoque más allá del conductor humano.
Para Tesla, el fallo representa un golpe a su reputación tecnológica y plantea nuevas interrogantes sobre los límites legales y éticos de la automatización en la industria automotriz. Esta vez, el fabricante no podrá simplemente dejar atrás las consecuencias.