Para los ganadores del Nobel de la Paz que están encarcelados, este galardón no les devolvió la libertad

Estocolmo- Tras anunciarse que la activista iraní, Narges Mohammadi, fue galardonada con el Premio Nobel de la Paz, la presidenta del Comité Noruego del Nobel exhortó a Irán a liberar de prisión a Mohammadi y permitirle recibir el galardón en la ceremonia anual de premios que se llevará a cabo en diciembre.

No obstante, este tipo de peticiones comúnmente tienen pocos resultados favorables.

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Mohammadi, quien es una defensora de los derechos humanos iraní, se convirtió en la quinta laureada con el Nobel de la Paz que lo recibe estando en prisión o bajo arresto domiciliario.

En ninguno de los casos anteriores el premio derivó en la liberación del ganador. Al contrario, dos de ellos permanecieron privados de la libertad hasta el día de su muerte.

A continuación te ofrecemos una mirada a los anteriores ganadores del Nobel de la Paz que se encontraban detenidos al momento del anuncio:

CARL VON OSSIETZKY

Tras darse a conocer que el periodista alemán Carl Von Ossietzky había ganado el Nobel de la Paz en 1935, hizo enfureció tanto a Adolf Hitler que el líder nazi prohibió a todos los alemanes aceptar un Premio Nobel, detalla la Agencia The Associated Press.

Ossietzky fue encarcelado imputado de revelar planes secretos para el rearme alemán en la década de 1920. Si bien, fue liberado siete meses después, nuevamente fue arrestado y enviado a un campo de concentración tras la llegada al poder por parte de los nazis en 1933.

A pesar de las campañas para su liberación, el gobierno negó su liberación a Ossietzky, que para ese entonces ya se había enfermado de tuberculosis.

A Ossietzky se le permitió viajar a Noruega para recibir el galardón y fue puesto bajo vigilancia en un hospital civil hasta que finalmente murió en 1938. Se convirtió en el primer ganador de un Nobel de la Paz en morir encerrado.

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AUNG SAN SUU KYI

Si bien, el Premio Nobel de la Paz favoreció el apoyo internacional a la líder de la oposición de Myanmar, Aung San Suu Kyi, quien estaba bajo arresto domiciliario cuando se anunció que fue galardonada en 1991. Sin embargo, ella continuó entrando y saliendo del arresto domiciliario hasta su liberación en 2010.

Dos años después, Suu Kyi dio su discurso de recepción del Nobel, pero cuando llegó al gobierno, su gloria de Premio Nobel se evaporó al “ser criticada por ignorar y a veces defender las atrocidades cometidas por las fuerzas militares, entre ellas la represión de 2017 contra los musulmanes rohinyas”, precisa AP.

Suu Kyi fue de nuevamente cuenta detenida cuando los militares derrocaron a su gobierno en 2021, y continúa presa a pesar de los intentos para su liberación por parte del Comité Noruego del Nobel y otras instancias.

LIU XIAOBO

Cuando en 2010, se anunció que Liu Xiaobo había sido galardonado con el Premio Nobel de la Paz, él estaba cumpliendo una sentencia de 11 años de prisión por incitar a la subversión al defender la puesta en marcha amplias reformas políticas y mayores derechos humanos en China.

El entonces presidente estadounidense, Barak Obama, intercedió por la liberación de Liu; sin embargo, fue en vano.

Tras anunciarse que Liu había sido ganador del Nobel de la Paz, irritó tanto a Beijing, que decidió suspendió las negociaciones comerciales con Noruega.

Durante la ceremonia de entrega de los Premios Nobel, la ausencia de Liu fue evidenciada por una silla vacía. Falleció de cáncer de hígado en 2017.

ALES BIALIATSKI

Ales Bialiatski, defensor bielorruso de la democracia, quien el año pasado compartió el Premio Nobel de la Paz con grupos de derechos humanos de Rusia y Ucrania, es la cuarta persona que recibe el galardón estando en encarcelado.

Bialiatski fundó la organización no gubernamental Centro de Derechos Humanos Viasna. Fue arrestado en 2020 después de las protestas en contra de la reelección del presidente bielorruso Alexander Lukashenko.

Un tribunal lo sentenció a 10 años de cárcel en marzo. Su esposa manifestó en mayo pasado que Bialiatsky habría sido trasladado a una prisión bielorrusa que es conocida por su brutalidad.

Con información de la Agencia de Associated Press.