Sepan que seguiré orando por nuestro país: Tillerson

Internacional
/ 16 marzo 2018

Exhortó al cuerpo diplomático a seguir exhibiendo las cualidades de liderazgo que los distinguen al prepararse para un nuevo jefe.

El destituido jefe de la diplomacia estadunidense, Rex Tillerson, dijo que está orando por su país.

En un mensaje a embajadas y consulados estadunidenses, tres días después de que el presidente Donald Trump lo despidió, el saliente secretario de Estado expresó que estaba orgulloso de los diplomáticos y aplaudía sus éxitos.

"Sepan que seguiré orando por nuestro país, nuestros líderes y los esfuerzos de ustedes para hacer un mundo mejor que el que recibimos", señaló este viernes en su mensaje.

Exhortó al cuerpo diplomático a seguir exhibiendo las cualidades de liderazgo que los distinguen al prepararse para un nuevo jefe.

Tillerson, despedido bruscamente por el magnate el martes, no mencionó al mandatario ni a su sucesor designado, el jefe de la CIA, Mike Pompeo.

Únicamente manifestó que el departamento quedaba en buenas manos con su jefe interino, el subsecretario de Estado, John Sullivan.

"En esta época de transición, sé que seguirán exhibiendo las cualidades de liderazgo que los distinguen", escribió.

"Los exhorto a seguir concentrados en nuestra misión compartida y mantener un proceso de transición ordenado y sin tropiezos. Confío plenamente en que seguirán trabajando de manera diligente para promover nuestros intereses nacionales y nuestros valores como nación".

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Tillerson recibió críticas por sus intentos de reducir el presupuesto y el personal del departamento, lo que provocó una caída en picada de la moral interna.

Sin embargo, elogió la dedicación, el talento y el patriotismo del cuerpo diplomático y su disposición de servir a la nación lejos de casa y a veces con riesgo personal.

"Aunque suelen recibir escaso reconocimiento o aplausos por estos sacrificios, la abnegación de ustedes fuera de lo común permite a cientos de millones de estadounidenses vivir en paz y libertad", escribió.

Aunque entregó las responsabilidades cotidianas del departamento a Sullivan, Tillerson conservará el título hasta el 31 de marzo.

Considerado una influencia moderadora sobre Trump, el jefe de la diplomacia tuvo varios enfrentamientos con su jefe en torno al acuerdo climático de París, el traslado de la embajada en Israel a Jerusalén, el acuerdo nuclear con Irán y otros asuntos cruciales de política exterior.

Después de meses de rumores sobre su futuro en el gobierno, Trump lo despidió horas después de que el secretario regresó de una gira por cinco países de África.

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