La primera ministra de Escocia Nicola Sturgeon renuncia tras la indignación por las leyes transgénero
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Sturgeon, de 52 años, dijo que renunciaba “orgullosa” de haber sido la primera mujer y la que más tiempo ha servido en el cargo de primera ministra
El día de hoy, Nicola Sturgeon, primera ministra de Escocia ha renunciado inesperadamente luego de meses de indignación por las relajadas leyes transgénero que permitieron enviar a un violador a una prisión para mujeres.
Sturgeon, de 52 años, dijo que renunciaba “orgullosa” de haber sido la primera mujer y la que más tiempo ha servido en el cargo de primera ministra, y calificó como el privilegio de mi vida haber dirigido el gobierno descentralizado del país durante ocho años.
Señaló cuántos estarán “molestos” por su impactante anuncio mientras bromeaba diciendo que otros “se las arreglarán bien”.
“Por cada persona en Escocia que me ama, hay otra que, digamos, podría no estar tan entusiasmada”, señaló sobre sus críticos.
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Sturgeon insistió en que la indignación por su divisiva Reforma de Reconocimiento de Género, que permite que cualquier persona mayor de 16 años cambie la designación de género sin un diagnóstico médico, no había sido la “última gota”.
La reforma fue aclamada por activistas transgénero como un paso histórico. Pero la ira se desbordó el mes pasado cuando se supo que un violador con la cabeza rapada fue enviado a una prisión para mujeres después de declarar que era una mujer transgénero.
“He sido y siempre seré feminista”, dijo Sturgeon sobre sus críticos, incluida la autora de “Harry Potter”, JK Rowling, quien la acusó de ser una “destructora de los derechos de las mujeres” con las leyes.
“Pero también defenderé a cualquier grupo social, estigmatizado, discriminado, marginado y vulnerable”, dijo.
Aun así, sostuvo que su decisión “realmente difícil” de renunciar “no fue una reacción a las presiones a corto plazo” como esas reformas transgéneros.
En cambio, denunció la “brutalidad” de la vida como líder y dijo que “te pasa factura”.
El trabajo, que incluía ser viceprimer ministro durante ocho años antes de asumir el cargo, había sido “un privilegio”, pero también “realmente difícil... implacablemente”, dijo.
“Seamos claros, no espero violines aquí, pero soy un ser humano, además de un político”, dijo, lamentando no poder salir a caminar sola o tomar un café con un amigo.
“Dar absolutamente todo de ti mismo a este trabajo es la única manera de hacerlo”, dijo Sturgeon. “Pero en verdad, eso solo puede ser hecho por cualquiera por tanto tiempo. Para mí, ahora corre el peligro de alargarse demasiado”.
Hizo hincapié en que tenía la intención de permanecer en el Parlamento luchando por sus causas favoritas.
“Observa este espacio, hay mucho más por venir”, dijo.
Escocia es parte del Reino Unido, pero, al igual que Gales e Irlanda del Norte, tiene su propio gobierno semiautónomo con amplios poderes en áreas que incluyen la atención médica.
Como líder del Partido Nacional Escocés, Sturgeon había buscado independizarse del Reino Unido.
