Marcha Guardia Nacional sin freno por San Lázaro

CDMX.- La noche del viernes pasado y la madrugada del sábado fue la jornada de más de 12 horas en la que el bloque mayoritario conformado por Morena, el PT y PVEM en San Lázaro apretó y cerró filas para aprobar la iniciativa de la Guardia Nacional, sin aceptar ninguno de los cambios propuestos por la oposición.

El planteamiento del presidente Andrés Manuel López Obrador para dar el control de ese cuerpo policiaco a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se fue sin moverle ni una coma al Senado para su discusión. Poco sirvió el intercambio de posicionamientos y argumentos.

Los panistas encabezaron la resistencia que al final no cambió el resultado. Llevaron al pleno de San Lázaro la protesta principal de la discusión. Mostraron carteles que tenían capturas de pantalla de tuits de funcionarios, incluso del Presidente de México para recordar al grupo mayoritario que en algún momento rechazaron la militarización antes de llegar al poder.

“Es perverso que los potentados utilicen al Ejército para enfrentar el problema de la inseguridad que ellos crearon por dedicarse a saquear”, decía un mensaje del jefe del Ejecutivo federal, del 19 de febrero de 2019.

“Siempre hay un tuit”, ironizaban algunos sobre los posicionamientos de morenistas.

Y como este, decenas de personajes como Citlalli Hernández, Claudia Sheinbaum, Gerardo Fernández Noroña, Alfonso Durazo, Layda Sansores, entre otros.

Mientras, en la tribuna, el diputado albiazul Ricardo Villarreal cuestionó: “¿Y por qué hacerlo?, ¿por qué ir en contra de su ideología?, ¿por qué ir en contra de la ideología del presidente López Obrador, en contra de lo que ustedes le propusieron al pueblo de México?”.

La oposición y el bloque oficialista subían a tribuna a defender su postura, el PRI permaneció en sus curules viendo pasar el debate hasta el momento de la votación.

Hacia las 8:00 horas del viernes, las diferentes fracciones acordaron agilizar la discusión, inscribiendo las reservas en el Diario de los Debates para no pasar a tribuna y así terminar con la jornada legislativa.

Además del cansancio, gran parte de los diputados tenían vuelos programados a sus estados alrededor del mediodía, por lo que querían abandonar a la brevedad el recinto legislativo.

Así, después de 12 horas de discusión, en el pleno no se escucharon festejos de morenistas ni reclamos de la oposición. Los guindas se apuraron para abandonar tranquilamente el salón de sesiones, en tanto que los panistas se tomaron la foto grupal al frente. En el Senado dará la siguiente batalla.