Miles de armas militares de EU están extraviadas o robadas
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El gobierno estadounidense admitió que miles de armas militares están extraviadas o robadas, lo que dificulta rastrear el flujo de armamento a manos de organizaciones criminales en México
El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, ha negado que las armas tipo militar incautadas a criminales en México sean de origen estadounidense. Sin embargo, el gobierno estadounidense reconoció que no tiene un registro preciso de sus arsenales, por lo que es imposible saber con certeza si alguna de las armas incautadas en México proviene de sus filas.
El gobierno de México ha incautado miles de armas de alto poder en los últimos años.
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En 2022, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó que había incautado 221 ametralladoras totalmente automáticas, 56 lanzagranadas y una docena de lanzacohetes.
En una investigación publicada en 2021, la agencia AP encontró que al menos 1900 armas de fuego militares fueron perdidas o robadas durante la década de 2010-2020.
El ejército, la Marina, la Fuerza Aérea y los marines reconocieron a AP que “pistolas, ametralladoras, escopetas y rifles automáticos de asalto han desaparecido de armerías y almacenes... naves de guerra, de la Marina, de campos de tiro y otros lugares donde fueron usadas, almacenadas o transportadas”.
Una pistola Beretta de 9 mm usada en por lo menos cuatro tiroteos en Albany, Nueva York, era un arma del ejército que seguía registrada en una base militar en el Fuerte Bragg en Carolina del Norte.
En octubre de 2020, el Departamento de Policía de San Diego señaló que cuando pararon a un automóvil con placas caducas encontraron una pistola de forma de celular, una pistola y un lanzagranadas M203 en el vehículo.
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El Congreso estadounidense llegó a preocuparse tanto sobre estos reportes que en 2021 legisladores incluyeron una medida en el proyecto de ley anual sobre política militar que obliga al Pentágono a presentar un informe anual al Poder Legislativo sobre robos, pérdidas y recuperación de armas convencionales, municiones y explosivos de importancia.
El ejército ha dicho que ha mejorado el sistema de monitoreo de sus armas, pero oficiales del Pentágono no pudieron responder a preguntas de La Jornada sobre cuántas armas de fuego se han perdido, han sido robadas o no se sabe de su ubicación.
En una entrevista con La Jornada, el subsecretario del ejército de Estados Unidos, Gabe Camarillo, reconoció que su gobierno no tiene un registro preciso de sus arsenales. “A veces no sabemos realmente dónde está todo nuestro equipo excedente”, dijo.
Además de los problemas de seguridad en los arsenales militares, las leyes de control de armas en Estados Unidos también facilitan el flujo de armas de grado militar a manos de civiles.
Una búsqueda rápida por Internet obtuvo ofertas de ventas de lanzagranadas de 40 mm, una ametralladora M60 E6, 7.62x51mm, entre muchas otras armas de grado militar.
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El Giffords Law Center, organización que promueve mayor control de armas en el país, subraya que la ley federal prohíbe la posesión de ametralladoras recién fabricadas, pero permite el traslado de ametralladoras legalmente adquiridas antes del 19 de mayo de 1986. Para 2021, el registro nacional llegaba a 741 mil 146.
Además, más allá de armas completamente automáticas, muchas tiendas ofrecer armas semi que fácilmente pueden ser modificadas para volverlas automáticas.
Con información de La Jornada
