Sube de tono diferendo entre Senado y Cuba

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El senador Graco Ramírez asegura que es necesario revindicar los "valores" de la Revolución cubana; la cancillería cubana advierte que un pronunciamiento sobre la muerte de un disidente afectaría la relación bilateral
El diferendo entre senadores y el embajador de Cuba en México, Manuel Francisco Aguilera de la Paz, se agudizó.
El senador del PRD, Graco Ramírez, respondió al diplomático que es necesario revindicar los "valores" de la Revolución cubana y, por ello, le solicitó una visa para acudir a la isla y observar las condiciones de los disidentes al gobierno de Raúl Castro.
Graco Ramírez informó al Embajador en una carta que desea entrevistarse con representantes de diversas organizaciones defensoras de los Derechos Humanos, con presos políticos y sus familias.
"Para quienes siempre hemos sido militantes de la izquierda, resulta importante que la República de Cuba revindique todos y cada uno de los logros de la revolución cubana y evite que la persecución de disidentes políticos se convierta en un instrumento que pueda utilizarse para denostar los grandes logros que en materia social, educativa y sanitaria han convertido a Cuba en un referente del contexto latinoamericano", explica el legislador.
Esta misma solicitud será hecha por la senadora del PRI, Rosario Green
El gobierno de Cuba presionó al Senado para que no se llevara al Pleno esta mañana un punto de acuerdo para condenar la muerte del disidente cubano Orlando Zapata Tamayo y exhortar a la Secretaría de Relaciones Exteriores a solicitar al régimen de Castro la "pronta liberación de todos los presos de conciencia encarcelados" en la isla.
El Embajador de Cuba en México, Manuel Aguilera de la Paz, advirtió a los presidentes de los órganos de gobierno del Senado, Carlos Navarrete Ruiz (PRD) y Gustavo Madero Muñoz (PAN), que para su gobierno un pronunciamiento de esta naturaleza incidirá "negativamente" en la relación bilateral de México y Cuba.
En la carta, el diplomático de la isla afirma que "considero improcedente someter a la aprobación del Honorable Senado de la República un proyecto de punto de acuerdo sobre un asunto concerniente a la política interna de otro estado, que de ser aprobado, puede incidir negativamente en las relaciones entre nuestros dos países, porque exhortaría al gobierno de los Estados Unidos Mexicanos a inmiscuirse en los asuntos internos de Cuba".