Para el menor, 50% de su rancho; AMLO cedió bajo la figura de usufructo vitalicio

Nacional
/ 16 septiembre 2016

A su hijo Jesús Ernesto le tocaron 6,918 metros cuadrados de la finca La Chingada, ubicada en Chiapas

Ciudad de México. Jesús Ernesto López Gutiérrez, el menor de los cuatro hijos de Andrés Manuel López Obrador, fue quien recibió la extensión más grande de La Chingada, el rancho que su padre dividió y les donó desde abril de 2013, según documentos del Registro Público de la Propiedad y el Comercio del estado de Chiapas, de los que Excélsior tiene copia.

López Gutiérrez, de nueve años e hijo de Beatriz Gutiérrez Müller, recibió en donación de su padre 6 mil 918 metros cuadrados del rancho ubicado en Palenque, Chiapas, lo que representa  51.85% de la propiedad de 13 mil 341 metros cuadrados que López Obrador obtuvo como herencia de sus padres.

En el acto de protocolización de la donación a Jesús Ernesto, el menor fue representado por Manuela del Carmen Obrador Narváez, prima del líder nacional de Morena, según consta en la escritura pública 10,109.

Obrador Narváez, a quien AMLO llama “Manuelita Obrador” además de llamarse igual que la madre del líder partidista, Manuela Obrador González,  fue directora municipal de Palenque y en las pasadas elecciones de 2015, candidata a diputada federal.

Durante la campaña electoral del año pasado, López Obrador grabó un video de apoyo para Manuela Obrador en su propiedad. “les recomiendo mucho a Manuelita Obrador, es mi prima, no tengo por qué negarlo, pero ha trabajado siempre por la justicia, por la democracia…

“Ella —sigue el video— es candidata a diputada federal. Y va al Congreso para representar al pueblo, va al Congreso para que no se privatice el agua y también va al Congreso porque vamos a modificar todas las reformas que han hecho para entregar bienes de la nación y del pueblo a particulares, sobre todo a extranjeros.

Después de Jesús Ernesto, José Ramón López Beltrán, el segundo hijo de López Obrador, fue el que más terreno recibió de la propiedad de su padre en Palenque, mil 920 metros cuadrados, que representa el 14.39% del rancho.

Andrés Manuel junior recibió bajo la figura jurídica de “usufructo vitalicio”, igual que sus hermanos, mil 668 metros cuadrados, que es 12.50% de la totalidad de la propiedad original, y para Gonzalo Alfonso, el tercer hijo, fueron mil 671 metros cuadrados, un 12.52% de La Chingada.

Familiares del excandidato presidencial comentaron que Jesús Ernesto recibió la mayor extensión del rancho, debido a que sus hermanos mayores ya habían obtenido distintas donaciones y herencia de parte de  López Obrador.

Entre las propiedades que AMLO entregó a sus hijos antes de 2013 se cuentan una casa en Villahermosa, adquirida en 1981 al contado con valor de 700 mil pesos; una de las casas de Teapa, Tabasco, que data de 1985 con pago al contado, por 300 mil pesos; la otra en ese mismo municipio fue adquirida en 1998 a través de una donación o herencia y su valor estimado entonces era de 100 mil pesos; el predio rústico, también está en el rubro de donación en 2000 y su valor es de 500 mil pesos; mientras que el departamento en la Ciudad de México lo compró al contado en 2002 a un precio de un millón 97 mil pesos y compartía la propiedad con Rocío Beltrán, quien murió el 12 de enero de 2003.

Aunque los precios de estas propiedades no han sido actualizadas desde que se conocieron en las declaraciones patrimoniales que López Obrador hizo cuando era jefe de Gobierno del entonces DF, entre 2000 y 2004, la suma es dos millones 697 mil pesos.

En los documentos del Registro Público de la Propiedad y del Comercio de Chiapas, a cada uno de los predios los tasa con los siguientes precios:

El de Jesús Ernesto en un millón 795 mil 386 pesos; el de José Ramón en 254 mil 490 pesos, el de Andrés Manuel junior en 209 mil 40 pesos y el de Gonzalo Alfonso en 209 mil 441.

En este sentido, el total de lo donado por López Obrador sería de dos millones 468 mil 357 pesos. Y si se toma en cuenta que en diciembre de 2007 cuando Andrés Manuel López Obrador escrituró la herencia, el predio de 13 mil 341 metros cuadrados estaba valuado en un millón 52 mil 722 pesos, en nueve años tuvo una plusvalía de un millón 215 mil 634 pesos, sin contar los mil 161 metros cuadrados que no donó López Obrador.

No me interesa el dinero, dice

 “No todo el que tiene dinero es malvado”, señala.

Nunca me ha interesado el dinero ni lo material”, aseguró Andrés Manuel López Obrador, dirigente nacional del partido Morena.

A través de un video compartido en su cuenta de Facebook, el dos veces candidato a la Presidencia de la República sostuvo que el desinterés por lo material es algo que no pueden comprender sus adversarios políticos, a quienes volvió a tachar de corruptos.

Este mensaje se da a conocer luego de que Excélsior reveló que el exjefe de Gobierno de la Ciudad de México heredó a sus hijos el rancho La Chingada, que a su vez le dejaron como herencia sus padres hace 16 años, sin embargo, el traspaso se dará hasta que él muera.

El recurso legal utilizado indica que los hijos no podrán usar ni poseer la finca mientras López Obrador viva; no obstante, aun cuando no aparezca como dueño, el tabasqueño podrá hacer con ella  lo que quiera y disfrutar de los beneficios que produzca.

Esta propiedad no fue incluida en su reciente declaración 3de3 ni en las anteriores a 2012.

En el mensaje que publicó en Facebook, Andrés Manuel López Obrador relata que hace tiempo una mujer de nombre Hilda Castilla Flores le entregó un sobre en el marco de unos recorridos que realizaba  en alguna comunidad de Monterrey, Nuevo León.

Al pensar que se trataba de una carta, la abrió recientemente y se dio cuenta de que su contenido eran 100 dólares, los cuales había donado a su causa un hombre de nombre Froylán Solís Guerrero, fallecido en agosto de 2014.

“Recuerdo bien que en Benito Juárez, muy cercano a Monterrey, una señora me entregó esta carta, siempre me entregan cartas, peticiones, y me llamó la atención porque me dice: ya estoy contenta, ya cumplí con mi esposo, que era su deseo, jamás pensé que llegaría el día de entregarle su encomienda”, contó.

El sobre decía “para López Obrador y su buena acción”, agregó el tabasqueño.

Más adelante, señala que actos como esos le conmueven y explican el porqué de su movimiento, “algo que no van a entender nunca los corruptos”.

Enseguida, recordó que en 2006 tras estallar el conflicto postelectoral, mucha gente hizo donaciones económicas a una cuenta bancaria para apoyar su inconformidad.

Acciones como esa lo sostienen, pero no en lo material sino en lo emocional, y por eso seguirá luchando y teniendo principios y valores y nunca traicionará a la gente del pueblo que lo apoya, dijo.

“Esto lo doy a conocer porque nuestros adversarios que son muy corruptos, por eso es nuestro movimiento, no quieren aceptar que nosotros luchamos por ideales, por principios, que no me interesa el dinero, que nunca nos ha interesado lo material como también, aclaró, no todo el que tiene es malvado, estoy en contra de la riqueza mal habida, de la corrupción, no de la gente que con esfuerzo y trabajo logra un patrimonio, pero nosotros no luchamos por dinero”, aseveró.

López Obrador consideró que es una persona especial en  el sentido de que “no lucha por dinero”. “Eso, la gente lo percibe y yo creo que por eso nos apoyan y nos tienen confianza”, dice el tabasqueño.

Luego de difundir sus mensajes en la red social, el líder de Morena inició este jueves una gira por el Estado de México que lo llevará a recorrer diversos municipios hasta el próximo domingo.

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