‘Pseudo intelectuales’ los que piden retirar nuevos libros de texto, afirma Marx Arriaga

Hasta el día de hoy, la petición en línea que solicita el retiro de los nuevos libros de texto gratuitos ha reunido más de 20 mil firmas.

Estas nuevas publicaciones educativas han sido objeto de fuertes señalamientos por estar supuestamente “plagadas de errores” y por presuntas irregularidades en su aprobación y subsecuente producción.

Frente a las críticas de académicos y políticos de oposición, Marx Arriaga, actual director de Materiales Educativos de la Secretaría de Educación Pública (SEP), escribió en su cuenta de X (antes Twitter).

“Me cuentan que pseudo intelectuales (sic) braman porque se desechen los Libros de Texto Gratuitos... ¡No me lo creo! No creo que alguien que se defina como académico deseé una quema de libros. Pero si así fuera: ¡compañerxs, corran por sus libros prohibidos porque serán de colección!”

Alma Maldonado, investigadora del Departamento de Investigaciones Educativas, perteneciente al Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav), inició el pasado 22 de julio la iniciativa en Change.org para detener la distribución de los libros de texto. Hasta el momento, su petición cuenta con 21 mil 403 firmas de apoyo.

Entre sus argumentos, la académica resalta que no se realizaron pruebas piloto para modificar el Plan de Estudio para la educación preescolar, primaria y secundaria, a pesar de que así lo ordenó el decreto publicado en 19 de agosto de 2022 en el Diario Oficial de la Federación.

“No se hicieron pruebas piloto ni se conoce el resultado de una sola evaluación. Tampoco se han dado a conocer los programas de estudio detallados para cada grado. Sin embargo, —para sorpresa de la sociedad— se imprimieron libros de todos los grados de primaria y secundaria, desapareciendo los que hasta ahora se utilizaban para las diversas materias”, dice Maldonado en el texto.

Señala también que los nuevos textos están llenos de errores y que la SEP reservó los archivos relacionados con la elaboración de los libros por cinco años. “¿Qué esconden?”, cuestiona.

“Los nuevos libros que hemos podido revisar están plagados de errores. Es evidente que sus autores se niegan a presentarlos oficialmente para evitar que sean evaluados por expertos, ya que desean imponerlos en este nuevo año escolar. A pesar de eso, existen versiones electrónicas e impresas que se han filtrado a los medios y permiten ver sus grandes deficiencias”, añade.

Asimismo, la investigadora critica la desaparición de libros específicos para cada materia- por ejemplo, Matemáticas, Geografía, Español, Historia, Biología, etc.-, lo que impediría que las infancias aprendan de manera sistemática y reafirmen sus aprendizajes en casa.

Los nuevos libros de texto en su lugar cuentan con títulos como “Nuestros Saberes”, “Múltiples Lenguajes” y otros tres de “Proyectos sociocríticos interdisciplinarios”.

“No aprenderán el razonamiento lógico de las matemáticas, no profundizarán sus conocimientos del español, ni tendrán libros de lecturas. Supuestamente, los niños ahora aprenderán haciendo proyectos que los maestros escogerán de los nuevos libros”, dice Maldonado.

Acerca de los proyectos sociocríticos, la académica señala que podrían ser factibles “si existieran recursos adecuados y capacitación docente”.

Detalla que estas actividades ya se usan en los salones de clase, pero “de ninguna manera sustituyen la enseñanza de las disciplinas porque no todos los temas pueden ser profundizados y ejercitados a través de proyectos”.

La académica también acusa que la educación secundaria tendrá “un esquema similar a la primaria, sin libros de materias y solo con dos libros de referencia y de cápsulas educativas, sin ningún orden ni secuencia”.

Adelanta que la variedad de textos suministrados por editoriales de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM) será eliminada, con lo que profesores de secundaria perderían la oportunidad de escoger “de entre diez a 16 títulos de libros aprobados por la SEP” para la enseñanza de cada materia.

“Un año perdido en aprendizaje, aunado a los problemas que derivaron del cierre de las escuelas en la pandemia, va a tener efectos cognitivos quizás irreversibles”, alerta la petición de Maldonado.

“Esto hará que las brechas de desigualdad existentes se agranden, cuando el proyecto de mayor prioridad de este gobierno debería ser una educación de calidad en todas las escuelas públicas del país”, concluye.

Durante su conferencia matutina del 25 de julio, el presidente Andrés Manuel López Obrador respaldó la producción de los nuevos libros de texto y aseguró que millones de ejemplares se distribuirán para el próximo ciclo escolar 2023-2024.

“No les gustan los contenidos a los conservadores, eso no es de ahora”, dijo el mandatario al asegurar que el rechazo se da por parte de militantes del Partido Acción Nacional (PAN).

“No es novedad que ellos estén en contra y que si existen estos fragmentos, párrafos, capítulos en un libro determinado y usen eso para decir que todos los libros están mal”, afirmó.

Con información de Aristegui