Una placa para Cota sería un detallazo

En la Fiesta Brava es muy común que premien a los toreros con placas alusivas a sus más espectaculares faenas. Recuerdo cómo Manolo Martínez, ya en sus últimas corridas, bordó una serie de pases que fueron inmortalizados con una insignia que permanece en la plaza Lorenzo Garza.

En el beisbol, estos galardones tienen un carácter más político que deportivo. Es común ver en los estadios placas alusivas a la inauguración del coso con los respectivos nombres del alcalde en turno y el gobernador.

¿Y los peloteros?

Todo esto viene a colación por la hazaña que logró Jesús Cota el 12 de abril en la serie ante los Sultanes, cuando conectó dos grand slams en el mismo partido.

Sólo tres peloteros en la historia, el último en 1999, han hecho lo que Cota y eso nos lleva a concluir que es una acción más difícil que los juegos perfectos o sin hit ni carrera.

Entonces ¿por qué no perpetuar este logro con una placa?

Hace tiempo, en Monterrey, un periodista propuso colocar una placa cerca del cruce de Universidad y Calzada Victoria, para recordar por siempre a los grandes peloteros que caminaron desde sus hoteles al viejo Parque Cuauhtémoc.

La idea prosperó y por mucho tiempo ese distintivo permaneció en el lugar, hasta que los ladrones lo robaron. En el Parque de Cuauhtémoc y Famosa, alguna vez los directivos de la LMB develaron una placa en honor de Cono Canavati, exdueño de los Sultanes.

Dejar un testimonio de los batazos de Jesús Cota en el parque Madero sería algo novedoso y no muy caro. Incluso se podría buscar patrocinio o el apoyo de los Medios de Comunicación.
Es una idea al aire, para que no digan los directivos que sólo estamos pensando en lo malo.

¿Y Héctor Espino?

Hablar de Héctor Espino en Hermosillo es referirse a un ícono imborrable que ha superado el paso del tiempo. Es por ello que dejarlo a un lado ahora que se construye un nuevo estadio deberá dar mucho para la polémica.

El Estadio Sonora sustituirá al Héctor Espino y con ello relegará al máximo jonronero de la pelota profesional en México.

Hasta el momento no he escuchado protestas públicas por el hecho, pero estoy seguro que miles de sonorenses creen que el nuevo estadio debe llamarse también en honor al "Supermán" de Chihuahua.

¿Pero qué podemos esperar de un gobernador que para lograr sus propósitos de quitarle el agua al sur del Estado, aseguró que la tribu Yaqui no existía?

¡Seguramente nunca vio jugar a don Héctor!