Ganadores en 20 años

Opinión
/ 2 octubre 2015

En últimas colaboraciones hemos comentado acerca de la tendencia global en la economía, especialmente orientándonos al empleo. Ahora podemos ver qué ocurre en la economía mexicana y saber si lo que hemos platicado hasta ahora se cumple.

Para analizar mejor lo que ha pasado en este tiempo hice tres cálculos de crecimiento. Todo el periodo (de 1993 a 2012), los gobiernos del PAN (de 2000 a 2012) y la crisis global (2007-2012). El crecimiento promedio anual de la economía fue de 2.6, 2.0 y 1.6% respectivamente. Dicho de otro modo, en los últimos cinco años hemos crecido muy poco (todavía no acabamos de pagar el impacto de la crisis global), pero en los años previos a 2000 crecimos más rápido, aunque se incluye ahí la crisis de 1995.

En aquel entonces, aunque la crisis fue severa, el jalón que nos dio el TLCAN nos permitió crecer cinco años a cerca de 6% anual (de 1996 a 2000, inclusive). Luego vino el ingreso de China a la OMC, y se nos acabó el impulso.

De hecho, a la hora que uno identifica las actividades económicas más exitosas durante estos 19 años se encuentra uno con que tres de ellas fueron exitosas hasta el 2000, nada más: equipo de cómputo, equipo eléctrico e industrias metálicas básicas fueron barridos por China después del 2001. Otras actividades lograron sobrevivir a ese golpe, pero no a la crisis de 2007: Ganadería (que es la única actividad primaria exitosa), transporte (aéreo, por ferrocarril y por agua) y transporte por ductos.

Estas tres actividades crecen más que la economía en los períodos 93-12, y 00-12, pero no en los últimos cinco años. Una actividad con un comportamiento un poco extraño es la de servicios inmobiliarios, que sólo crece más que la economía en el período 2000-2007.

Las actividades que le comentaré a continuación han logrado crecer durante los 19 años a un ritmo superior al de la economía en su conjunto: construcción de obras de ingeniería civil y obra pesada; energía eléctrica; fabricación de equipo de transporte; fabricación de maquinaria y equipo; bebidas y tabaco; papel; y otras manufacturas. Todas estas actividades son del sector secundario, y son las únicas que crecen durante todo ese tiempo. En los últimos cinco años se les han sumado: productos metálicos, impresión, madera y plástico y hule. De ellas, productos metálicos tuvo en realidad su mejor momento antes del 2000 y ahora apenas logra alcanzar la dinámica general de la economía.

Impresión y madera han tenido muy malos años desde 1993, y aunque ahora estén creciendo un poco más, son menores a lo que eran hace 20 años. Sólo plásticos y hule ha logrado mantener, en todo el periodo, un comportamiento parecido al de la economía en su conjunto.

De las actividades industriales que han crecido todo el tiempo el patrón es claro: infraestructura, electricidad, maquinaria y equipo, especialmente automóviles, producción de papel y bebidas y tabaco. En buena medida, se trata del mercado exterior jalando a la industria nacional.

En los servicios las cosas son interesantes. Han crecido continuamente: servicios relacionados a la minería, otras telecomunicaciones, asociaciones y organizaciones, la banca, fianzas y seguros, alquiler de bienes muebles (marcas y franquicias), autotransporte de carga, mensajería y almacenamiento, comercio y dirección de corporativos y empresas. Aunque no por completo, también estas actividades están asociadas a la economía global.

A partir del 2000 empieza a crecer internet, aunque apenas arriba del crecimiento promedio de la economía, y en los últimos cinco años se le suman otros servicios de información. También en este último periodo crecieron varias actividades asociadas al turismo: alojamiento temporal; museos, sitios, entretenimiento y recreación; servicios artísticos.

En suma, las actividades económicas que crecen por encima del promedio, sea que midamos desde 1993, desde 2000 o desde 2007, son en su mayoría actividades orientadas al mercado global. Manufacturas para exportación, servicios asociados al comercio, transporte y almacenamiento, actividades asociadas al manejo de información (simple y financiera), etc.

Como ya hemos comentado en varias ocasiones, ha sido gracias a que cambiamos nuestra economía a inicios de los noventa que tenemos ahora algunas actividades que son exitosas. Sin ellas, el crecimiento promedio de la economía sería muy inferior, como lo pueden constatar regiones enteras de México que no tienen interacción con las actividades orientadas globalmente. Dicho de otro modo, el sureste del país, casi por completo, que no tiene instalaciones manufactureras para exportar, no aprovecha el crecimiento de las actividades que hemos mencionado. En algún lugar hay ganadería, o hay turismo, y esos puntos crecen, pero el resto se va rezagando.

Frente a ello, muchas voces piden reactivar el mercado interno, pero ese mercado existe, sólo que no consume lo que aquí se produce. El problema es otro, como también hemos insistido, es un problema de oferta: no producimos bien.

El jueves comento con usted los grandes perdedores de estas dos décadas, para tener el panorama completo. Y ya usted dirá qué debe hacerse en México.

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