Imposible ignorar tantos agravios
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A algunos medios se les sugiere ignorar a la CNTE y no incomodarse por cuanto hagan sus integrantes, engreídos porque les son tolerados sus estropicios. Pero los habitantes del Distrito Federal no tienen atole en las venas como para soportar, indiferentes, la avalancha de agravios
Mañana harán otra marcha los paristas para protestar por las víctimas del 2 de octubre de 1968 y querrán compararse con aquellas víctimas. Y la población capitalina sufrirá nuevos atropellos en este caos de tantos meses.
Pese a la evidente división en la minoría de los paristas, los acampados en el Monumento a la Revolución fueron presionados por sus líderes, en una consulta amañada, para continuar el paro.
Francisco Bravo y Rubén Núñez, dirigentes de las secciones 9 y 22 de la CNTE, se burlan del gobierno federal, pues éste no despide a cuantos han dejado de laborar y que además exigen pagos puntuales. Retan al Ejecutivo a un paro masivo.
Cuando se trató de limpiar el Zócalo de disidentes -porque sería realizado el "Grito" y el desfile militar-, el jefe de Gobierno del DF, Miguel Mancera, no dudó en enviar a los granaderos y con ayuda de agentes federales fue hecho el desalojo.
Tras la limpia del Zócalo, los capitalinos no entienden por qué a los revoltosos de la CNTE se les permitió acampar en el Monumento a la Revolución y allí traman sus marchas y bloqueos de cada día.
Los paristas invocan respeto a sus derechos humanos, pero ni ellos ni las autoridades respetan los de la población del DF, la cual manifiesta desprecio y odio a quienes trastocan la vida citadina.
Nadie puede ignorar los agravios de un bando parásito que lejos de cumplir con su trabajo se niega a ser evaluado en su desempeño de educador y sobre eso exige prebendas y se hermana con otro sector dedicado a la extorsión, el SME de la inhumada Luz y Fuerza del Centro.
Comerciantes del DF han perdido negocios debido a los disturbios de la CNTE. ¿Por qué hemos de ser indolentes a los agravios de individuos incapaces para ser profesores y son arrastrados por líderes corruptos?
LO DEL 2 DE OCTUBRE es otro motivo de agresión a los capitalinos. En varios años han sufrido ataques de barbarie en sus negocios, ejecutados por anarquistas y bandoleros que ni conocen la verdad de aquel conflicto.
El 26 de julio pasado se cumplieron 45 años del pleito en La Ciudadela entre estudiantes de la Vocacional 5 y la preparatoria Isaac Ochoterena. Fue una riña sin importancia, pero llegó el general Raúl Mendiolea al frente de granaderos y a golpes de macana separó a los rijosos.
Desde luego fue pedida la desaparición de los granaderos y la destitución del jefe de la Policía, general Luis Cueto Ramírez. En vez de dialogar con los jóvenes fue derribada de un disparo de bazuca la puerta de la Preparatoria Uno y creció el conflicto.
Hubo de intervenir el rector Javier Barros Sierra y terminó de pleito con el autoritario Díaz Ordaz, quien ordenó la ocupación de Ciudad Universitaria con el Ejército.
El rector renunció y así se llegó al 2 de octubre. El Comité Nacional de Huelga organizó un mitin en la Plaza de las Tres culturas y un batallón de soldados fue alineado en Prolongación de San Juan de Letrán.
Hasta las 18.30 horas no se había escuchado ningún disparo. En ese momento apareció un helicóptero y dejó caer dos luces de bengala. Fue la señal para los militares que abrieron fuego contra el edificio Chihuahua, de Tlatelolco.
Yo corrí, entre la multitud hacia el lado oriente de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Fui arrollado y juntó a mi cayó una joven con la cabeza destrozada. Si los soldados hubiesen disparado contra unos seis mil asistentes al acto, la matanza habría sido mayor. Se habló de 30 muertos.
Esto creen recordar cada año grupos ignorantes de ese movimiento. Y ahora se van a sumar los paristas de la CNTE porque quieren ser víctimas, como las del 2 de octubre.