Cada momento victorioso prepara el último

Opinión
/ 11 octubre 2025

Aquella trampa para atrapar monos fue ingeniosa.

Un orificio por el que apenas cabía la mano peluda. Si entraba podía atrapar los cacahuates. Pero solo podría salir si los soltaba. Quedaba el mono atrapado por no soltar los cacahuates que había logrado coger.

TE PUEDE INTERESAR: Defender dignidad y libertad

Se multiplican trampas semejantes también en la vida humana. Hay mucha gente atrapada por no querer soltar lo que tomó con apetito desbocado.

Sufre el adicto por no poder soltar su adicción. Sufre el mandatario que no quiere soltar terreno para lograr la paz. Duele mucho la poda necesaria por no aceptar pérdida para mayor ganancia, ni quedarse truncado para hacer posible la fronda abundante.

MEDIOCRIDAD Y EXCELENCIA

La capacidad de renuncia en las encrucijadas existenciales hace que muchas vidas opten por seguir en mediocridad al no poner en juego el esfuerzo que podría conducir a la excelencia.

En la vida personal, en los ambientes familiares y en las empresas, en las decisiones de las maniobras políticas se quiere cosecha sin siembra fatigosa, se anhela el premio de la rifa sin decidirse al gasto para comprar el boleto.

Se dificultan los tratados de libre comercio entre las naciones que quedan entrampadas y atrapadas por recias decisiones omitidas.

En tiempos ya proféticos de estas postrimerías, no se suelta lo obsoleto, lo debilitado, lo devaluado, lo que perdió actualidad para poder saludar ese “hola” que solo es posible si se antepone el “adiós” imprescindible.

SOCIEDADES SIN PODAS NECESARIAS

Una sociedad se va haciendo salvaje e inhumana no solo por colapsos y derrumbes espectaculares sino por omitir renuncias y cambios de avance y de elevación para mayor eficiencia y autenticidad.

Aquel mono quedó atrapado porque su mano codiciosa no se vació para poder cambiar un puño de cacahuates por una vida en libertad. En otros casos de vida humana, dejar la andadera que fue tan útil; pero ya es estorbo para caminar, es tan sabio como quitar los andamiajes que fueron tan aprovechados para construir y son, ya ahora, adefesios en una fachada que se quiere lucir.

El camino hacia el último paso acertado, que es la pascua, se prepara con cada momento presente victorioso.

INTEMPERIE Y GRATUIDAD

El concierto, de gran calidad, es generoso y abierto.

La intemperie de la saltillense Plaza de Armas no ofrece, claro, la mejor acústica ni defiende del frío otoñal recién estrenado.

La invaluable voz de Elīna Garanča, la mezzosoprano de fama internacional, ha sido bien escogida para presentar un concierto de primer nivel en calidad artística.

El público da su aplauso gélido a la preciosa voz, acompañada por la Orquesta Filarmónica del Desierto y aplaude también a la audaz decisión de unir gratuidad con intemperie soportable.

TÉ CON FE

-Oye, ¿por qué a ti te apodan como “La Cuántica?”.

-Es que si no me observan soy onda; pero si me observan, soy partícula. Me enlazo fácilmente, no importa la distancia y puedo estar aquí y allá, aunque no sea al mismo tiempo...

Columna: Claraboya. El autor de Claraboya, quien ha escrito para Vanguardia desde hace más de 25 años, intenta apegarse a la definición de esa palabra para tratar de ser una luz que se filtra en los asuntos diarios de la comunidad local, nacional y del mundo. Escrita por Luferni, que no es un seudónimo sino un acróstico, esta colaboración forma ya parte del sello y estilo de este medio de comunicación.

COMENTARIOS