Comentarios sobre la guerra OTAN vs. Rusia

1. Los territorios de la cuenca del río Donbás (Donetsk, Lugansk, Jerson, Járpov y Saporiyia) y la península de Crimea en el Mar Negro, no fueron parte del último Principado de Kiev cuando en 1471 pasó al ducado de Lituania; esos territorios siempre formaron parte del imperio ruso. Dos siglos después, por planificación territorial soviética se concedieron esos espacios a Ucrania, incluida la península estratégica, en febrero de 1954, y, con la disolución de la URSS, se decidió unilateralmente que integraran el espacio ucranio, pero con 85% de su población con idioma ruso (4.25 millones de habitantes). Por lo anterior, la recuperación de esos territorios por parte de Rusia es históricamente válida.

2. Posterior a la reunificación de Alemania en marzo de 1991, y para no amenazar la seguridad de la entonces Unión Soviética con armamento nuclear cerca de sus fronteras, Estados Unidos y Europa se comprometieron a no extender el acuerdo de defensa mutua OTAN al oriente europeo, sin embargo, de 17 miembros ahora son 31 países afiliados.

3. En 2014, el presidente ucranio prorruso Víktor Yanukóvich se negó a firmar un acuerdo de supuesta “cooperación” con la Unión Europea, con imposiciones económicas del Fondo Monetario Internacional, para limitar la participación del Estado en la economía y reducir gasto público social; en noviembre de ese año iniciaron las revueltas proeuropeas organizadas por Estados Unidos a través de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), con gasto de 5 mil millones de dólares, según expresó Victoria Nuland, secretaria de Estado asistente de Estados Unidos (Sputnik Mundo, 22-04-14).

4. La convulsión llamada Euromaidán concluyó con un golpe de Estado y la destitución del presidente Yanukóvich por el Parlamento el 22 de febrero de 2015.

5. Con el Gobierno proeuropeo prosperaron grupos neonazis de ultraderecha, quienes glorifican a Stepan Bandera y colaboracionistas de los alemanes en la Segunda Guerra Mundial, nacionalistas que cometieron genocidios contra judíos y comunistas antes de la derrota de Hitler. Parte de estos grupos neofascistas se han integrado a las fuerzas armadas de Ucrania (El País, 10-04-22).

6. Ucrania es uno de los países con más corrupción en Europa, inclusive se investigan negocios oscuros de Hunter Biden, hijo del presidente Joe Biden, con la empresa de gas ucraniana Burisma (France 24, 25-09-19).

7. Desde 2014 se gestó la intención de independencia en poblaciones rusoparlantes del Dombás. Para contener el separatismo, la OTAN financió y armó a grupos neonazis (Mision Verdad, 23-02-22), sobre todo el temible Batallón Azov, quienes han asesinado a más de 10 mil civiles y 4 mil combatientes de defensa (Swiss.info.ch, 26-01-22); lo anterior justificó la “operación militar especial” ordenada por el presidente ruso Vladimir Putin el 24 de febrero de 2021, para “desnazificar” y proteger a esa población.

8. Las sanciones económicas y financieras a Rusia se originan desde 2014 (actualmente más de 14 mil sanciones) y para 2022 el PIB cayó -7.4%; sin embargo, es de los países menos endeudados del mundo (17% del PIB) y se han ampliado acuerdos comerciales con países de África y Asia, además del grupo BRICS, lo cual ha impedido el colapso económico ruso.

9. Dichas sanciones a Rusia han encarecido el petróleo, el gas y los alimentos, lo que ha generado inflación y distorsiones económicas globales, con impacto negativo en Europa, con recesión técnica en países como España, Italia y Alemania.

10. Occidente no reconocerá la independencia de territorios del Dombás y de Crimea (y su anexión a la Rusia del denominado “nuevo Hitler”) y continuará su apoyo bélico y económico a Ucrania. La guerra de la OTAN se sustenta en intereses geopolíticos y geoeconómicos de Estados Unidos, con sometimiento de Europa, además colapsar la economía rusa y provocar rebeliones internas, para debilitar acuerdos del país eslavo con China y su estrategia económica global “nueva ruta de la seda”. En el corto plazo la paz no es opción.