Entre ‘Scrooge’ y Enrique de Martino

Esta noche es Nochebuena y mañana Navidad, y si una cosa extrañamos en estas fechas de la programación de las televisoras mexicanas, además de los especiales de Perry Como, son las telenovelas navideñas.

Sí, fue entre finales del nuevo milenio, en específico 1999, y el año 2002, cuando el galán de moda de entonces Fernando Colunga, después de haber protagonizado una de las telenovelas más exitosas de “El Canal de las Estrellas” como lo era “Nunca te olvidaré”, producción de Juan Osorio en la que Colunga hizo pareja con la hoy fallecida actriz Edith González, le fueron asignadas por parte del hoy director del CEA, Eugenio Cobo, no solo una sino un par de telenovelas cortas al hilo con temática navideña propias para la temporada: la primera de ellas, bajo el título de “Cuento de Navidad” fue una adaptación del clásico original del británico Charles Dickens “Scrooge” y la segunda “Navidad sin Fin”, que curiosamente lo reunió por vez primera con su pareja de la nueva versión de “El Maleficio”, Marlene Favela.

Aunque en “Cuento de Navidad” el personaje protagónico del avaro Scrooge (bautizado en esta adaptación como Saúl), un empresario que le niega la ayuda que con desesperación le pide uno de sus empleados en vísperas de Navidad para una emergencia familiar, fue interpretado por el primer actor también desaparecido Juan Peláez y le dio réplica otro primer actor de hoy día como José Elías Moreno, en ella Colunga interpretó el protagonista juvenil de una subtrama en la que intervenía como dama joven otra actriz hoy tristemente fallecida todavía mucho antes que Edith González, Mariana Levy, y su éxito propició que para la mencionada telenovela “Navidad sin Fin” (200-.2002) se le diera el protagónico de la historia que le llevó a uno de sus primeros retos actorales en telenovela.

Este reto consistió en dejar de lado su ya para entonces estereotípica y posada galanura para interpretar a un trailero bonachón de nombre Pedro quien se encuentra con dos ángeles infantiles en uno de sus viajes cercanos a la Navidad, y aunque es obvio el homenaje al personaje y su interpretación al llamado “ídolo de México”, Pedro Infante, el uso de una nariz prostética lo hizo sacrificar su físico para remitirnos con esa caracterización, aunada a la personificación de este Pedro, a la fusión del mencionado Infante con uno de los personajes más reconocidos en cine y televisión de la dupla de cómicos de los años 70, Los Polivoces: el Wash and Wear, que interpretaba el primer actor Eduardo Manzano.

Con todo,, ya que hablamos de primeros actores en “Navidad sin fin” tanto Colunga y Favela se rodearon de primeros actores a su vez de cine y televisión como Ana Martín y el también recientemente fallecido Ignacio López Tarso (protagonistas de un clásico del cine como lo es “El Profeta Mimí”, de José Estrada) así como la ex reina de belleza y protagonista de clásicos del cine como “Lo que le pasó a Sansón” (Gilberto Martínez Solares, 1955), al lado de Tin Tan y “El Patrullero 777” (Migel M. Delgado, 1978), juntoa Cantinflas, Ana Bertha Lepe, en su último trabajo actoral previo a su muerte en el año 2013 interpretando a la madre de Colunga en la historia. Tristemente, otra integrante de este reparto que falleció en días pasados a los 64 años de edad fue la también primera actriz Rosita Pelayo.

Por todo lo antes contado, y siendo víctimas de la tortura que noche a noche en el horarioe stelar de “Las Estrellas” tanto Fernando Colunga y Marlene Favela nos recetan un par de las peores actuaciones de su trayectoria en el todavía más malo refrito de “El Maleficio”, vaya que añoramos con más ganas este tipo de seriales que favorablemente hoy pueden ser rescatados en You Tube. ¡Feliz Navidad!

Comentarios a: sopeoperas@yahoo.com