Hoja de ruta para la transformación de Coahuila

El pasado 8 de marzo, el Lic. Ricardo Mejía Berdeja me invitó a presentar un libro de su autoría junto con el Lic. Alfonso González, exdirector de la escuela de Ciencias Sociales. Esta es mi presentación.

El libro perfila las principales ideas que Ricardo Mejía Berdeja llevaría a cabo en caso de que el pueblo de Coahuila decida otorgarle el privilegio de ser gobernador.

Predominantemente señala su amor e interés por el estado y el deseo de sacarlo del ostracismo en que lo han mantenido los Moreira y Riquelme; y el riesgo de que esta dinastía continúe con Manolo Jímenez. Es un texto que pretende exponer las necesidades de cambio necesarias en nuestro Estado, y que se convertiría, más adelante, en la hoja de ruta a seguir para la transformación de Coahuila con la participación de los ciudadanos coahuilenses.

Este libro, pequeño en tamaño, pero grande en contenido, deja plasmado el motivo por el que el Lic. Mejía Berdeja se lanza para conseguir el cambio que Coahuila requiere. De acuerdo con el refrán de la sabiduría popular “Para tener la lengua larga, se debe tener la cola corta”, se refiere claramente a la calidad moral de quien señala, critica o denuncia. Quien se atreve a hablar sobre algún tema o persona en particular, antes debe estar seguro de que no será señalado o acusado por lo mismo de lo que acusa.

Ricardo Mejía ocupó un importante cargo en el gabinete del presidente López Obrador, como subsecretario de Seguridad del país. El año pasado promovió la Revocación de Mandato en el estado de Coahuila, identificándose con la gente y utilizando la misma estrategia que siguió Andrés Manuel López Obrador en su larga trayectoria como líder de la oposición. Esto es, preocuparse por mantener una cercanía con los ciudadanos, recorriendo la mayoría de los municipios y comunidades de Coahuila, lo que le permitió hacer un diagnóstico de los anhelos y esperanzas de los habitantes del estado y poder diseñar una estrategia de gestión pública basada en un escenario de participación ciudadana y en la defensa del interés público.

Al separarse de su cargo como subsecretario, Ricardo decidió venirse a su estado natal y liderar un movimiento cívico, integrando un equipo de personas conocedoras del mundo de la política en Coahuila, con gran experiencia y conocimiento de los diferentes sectores: privado, académico y social.

El Partido del Trabajo, que ha luchado en contra del modelo neoliberal durante los últimos 30 años, ahora lleva como abanderado a Ricardo Mejía Berdeja, líder carismático y valiente que ofrece la posibilidad de transitar del miedo a la esperanza, para acabar con la continuidad, los desfalcos al erario del estado y la sobreprotección que daría Manolo −en caso de ganar− a los gobiernos del moreirato.

Ricardo ha logrado que surja una voz nueva en Coahuila. La voz del cambio, logrando despertar el rugido del tigre que se oye fuerte y claro en todo el territorio coahuilense, avanzando cada día más, paso a paso, pero sin detenerse. Sus recorridos por el estado le han permitido determinar la necesidad de un equilibrio y un desarrollo compartido entre las diferentes regiones del estado.

Por otro lado, el miedo visceral de que el PRI pierda su cacicazgo de casi un siglo en el estado y la pretensión de prolongar el cacicazgo de los Moreira otros 6 años, después de los 18 años ya vividos, ha dado lugar a que los partidos antagonistas entre sí −hasta hace poco tiempo−, PRI, PAN y PRD, se coaliguen −de manera inverosímil− en un momento de desesperación.

Esa coalición oye sonar con miedo las campañas del adiós −o el rugido del tigre− cada vez más fuerte. Les aterra tener un contrincante que ofrece la esperanza de un futuro mejor y que no se detiene ante nada para desenmascarar a los corruptos, quienes han tenido el control del estado por tantos años.

En el libro, Ricardo deja muy claro que a los Moreira y a Riquelme no les importa la democracia ni las instituciones, les importa el poder del dinero. La ambición desmedida por el uso de los recursos públicos ha sido el sello que los ha caracterizado, y pretenden seguir manteniendo el control. Pero también tienen miedo: a ser juzgados por sus fechorías; a los malos manejos que han tenido con el erario en Coahuila; a la falta de libertades y la corrupción política, y por el abandono de las regiones del estado. Esto lo han podido lograr manteniéndose en la oscuridad de la impunidad. Pero la justicia no es ciega, ve en la oscuridad.

El miedo a perder una democracia simulada, lleva a seguir engañando al pueblo, haciendo que agachen una vez más la cabeza y permitan la continuación del modelo neoliberal, queriendo neutralizar las demandas populares y paralizar la acción. También está el poder político que la aberrante coalición pseudo-izquierda-centro-derecha tiene para sabotear a lo que sería el primer gobierno de transición hacia el nuevo orden constitucional.

Por todo lo anterior y más, ha surgido un Auténtico Movimiento Coahuilense, liderado por Ricardo Mejía Berdeja, quien le hará justicia a los ciudadanos de nuestro estado.