Las jugadas

La elección de la Sección 38 será la primera batalla que enfrentará el moreirato en su camino a la desintegración. Carlitos “N”, a pesar de sus triquiñuelas, se sabe que fue detenido por el Comité Ejecutivo Nacional y sometido, por primera vez, a una elección democrática, libre y secreta, de esas que no sabe ganar. Aun cuando la convocatoria fue amañada, pues quedaba poco tiempo para la conformación
de planillas y el cumplimiento de requisitos, como la expedición de las cartas de no antecedentes penales, el magisterio disidente logró colar una planilla que encabeza Pancho Gaytán con la esperanza de librarse de una vez por todas de los sátrapas y saqueadores del patrimonio de los maestros.

Así, después de la resolución 01/S38/2022, el Comité Electoral determinó que las tres planillas anotadas podrán participar en la elección del 9 de diciembre, fecha que podría convertirse en el día de la liberación magisterial del yugo de los Moreira.

La planilla “Unidad Institucional” (que en el nombre lleva la condena) encabezada por el mandadero de Carlitos, Sergio Ramírez, quien había sido colocado en la estratégica cartera de créditos de la 38, pretende continuar “con la institucionalidad de la Sección”, y cómo no, si hasta colocó a la “Jícara”, actual secretario general, como miembro de su planilla. ¡Haya cosa!

Acompañado en su registro por los enviados del líder (in)moral, Moreira, aquello parecía un destape presidencial, seguido de una serie de entrevistas a medios de comunicación de las cuatro grandes regiones del estado. Y ni así.

Paradójico resulta que en su plataforma política incluya cuatro páginas de promesas a los pensionados y jubilados, cuando en agosto de 2018 fue enviado por su patrón y amo a convencerlos de seguir pagando el 3 por ciento de cuotas por el servicio médico, ante la resolución de amparo que dio certeza legal a los disidentes jubilados, en una lucha suicida y que hoy habla de la doble moral del candidato del oficialismo.

Otra planilla, “Aliados al Rescate de la Sección 38”, es la encabezada por Isela Licerio. Se trata de una jugada para quitarle votos a los disidentes, ya que para empezar esta mentora pertenece al círculo íntimo de la “Jícara” como secretaria de Trabajo y Conflictos de Educación Secundaria.

Con una plataforma copiada de una planilla de otra sección estatal, específicamente de Sinaloa, Licerio no puede esconder su pasado moreiriano lleno de trucos y “tratos” para llegar a donde se encuentra, es decir, al límite de su incapacidad y descaro.

En mayo de 2018, Riquelme tuiteó: “Maestras como Isela Licerio son ejemplo de mujeres emprendedoras”, en un homenaje que le rindió la Sección 38. Luego, paradójicamente, en noviembre de 2021 la misma maestra emprendedora acudió a la Cámara de Diputados a denunciar que era objeto de presunta persecución “sindical y gubernamental” y de violencia de género porque aspira a dirigir ese sindicato, caso que fue tomado por un legislador morenista.

Por último, la planilla de Pancho Gaytán, “Ruta 11”, cuyo significado son 11 propuestas básicas, clamores de este magisterio aplastado por la maquinaria del estado y la mafia sindical de la 38. Su plataforma es amplia y al parecer cubre todos los aspectos que necesita la base magisterial a fin de lograr un posicionamiento no sólo del sindicato, sino sobre todo de los maestros afiliados, además promete la auditoría de todos los dineros del patrimonio magisterial.

Hijo de un líder sindical que apoyó a los mentores a través de negociaciones incluso ventajosas para el gremio, ha participado activamente también en la vida sindical y a su vez cuenta con un fuerte apoyo de los mentores de antigüedad, así como de pensionados y jubilados.

Los maestros de Coahuila deben saber que las elecciones se ganan o se pierden el día 9 de diciembre, y que solamente cuidando la misma se podrá vencer a la mafia que ha dominado a su sindicato en los últimos 17 años y los ha agraviado a través de saqueos inmisericordes que tienen sumido en la miseria al fondo de pensiones, ausente de medicamentos y servicios en sus clínicas, y han desaparecido sus espacios de recreación y esparcimiento.

Ya es tiempo que aquellos saqueadores paguen por sus pecados y se regrese al sindicato de maestros la probidad y honradez necesaria para la defensa de los intereses de este abatido gremio. Recuerden que el ser humano tiene que tener siempre el nivel de la dignidad por encima del nivel del miedo. Éxito a la disidencia magisterial. ¡Fuera los sinvergüenzas!